Aunque al químico e inventor Otto Rohm desarrolló la idea del plexiglás en 1901, no fue hasta 1933 que la compañía Rohm & Haas lo introdujo por primera vez en el mercado con el nombre comercial Plexiglas. El material, considerado como una alternativa liviana y resistente al vidrio, ha tenido una historia fascinante y ha experimentado una multitud de usos diferentes. Hoy, el plexiglás se sigue utilizando de formas nuevas e interesantes, incluso como un medio potencial para ayudar a combatir la propagación del Coronavirus. Restaurantes, tiendas y otros espacios han comenzado a usar particiones de plexiglás como escudos protectores tanto para trabajadores como para clientes, especialmente a medida que las ciudades y pueblos se vuelven a abrir lentamente. A continuación, nos sumergimos en este inusual material, abordando sus propiedades materiales, su historia y las formas en que se sigue utilizando hoy en día.