La New York High Line, obra de las oficinas Diller Scofidio + Renfro y James Corner Field Operations, es uno de los proyectos más relevantes y de mayor impacto social y mediático que se ha realizado en Nueva York en el último tiempo.
Lo interesante, novedoso y rescatable del proyecto es la operación de transformar la West Side Line, una línea elevada de ferrocarril, abandonada y obsoleta, en un paseo peatonal en altura con un interesante trabajo paisajístico y de preexistencias asociadas a esta infraestructura.