Este artículo se publicó originalmente en Common Edge.
Casi todo el mundo odia las salas de espera. Aquí hay cuatro estadísticas sobre estas de una encuesta administrada por Software Advice, un grupo de consulta con sede en Austin, Texas: el 80% de los y las encuestados y encuestadas dijeron que si se les dijera el tiempo de espera exacto minimizaría total o algo su frustración; El 40% dijo que estaría en disposición de ver a otro u otra profesional de la salud, si eso significase un tiempo de espera más corto; El 20% estarían a disposición de pagar una tarifa adicional por un servicio más rápido; y el 97% (¡prácticamente nuestra totalidad!) sienten frustración por los tiempos de espera. Y ahora, las salas de espera, además de ser algunos de los lugares más tristes del mundo, se han convertido en uno de los lugares más fáciles del mundo para contagiarse.