- Área: 500 m²
- Año: 2018
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Fotografías:Laurian Ghinitoiu
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Proveedores: DAaZ 幕友家具
Descripción enviada por el equipo del proyecto. Ubicado en el remoto pueblo de Tuanjie, el Woodhouse Hotel es uno de los primeros proyectos de una nueva política gubernamental para ayudar a mejorar la pobreza rural mediante la introducción del turismo agrícola. A diferencia de otras áreas rurales, el pueblo de Tuanjie tiene poca arquitectura tradicional que conservar. En cambio, los paisajes impresionantes y las tierras de cultivo libres de contaminación son los mayores activos de la aldea. Por lo tanto, nuestro objetivo de diseño se estableció para capturar la belleza de la naturaleza con formas tranquilas que armonizan con el entorno.
El hotel consta de 10 casas de madera de un solo piso en una ladera que se funde con abundantes pastos y bosques. La topografía del sitio es compleja y presenta formaciones rocosas dispersas. Los dibujos ya no proporcionan suficiente información en este caso. Finalmente, a través de un minucioso estudio del sitio, se determinó la ubicación y orientación de las diez casas de madera para capturar las vistas más atractivas sin interrumpir las formaciones rocosas y los bosques originales. Un sendero peatonal razonable conduce desde la base de la montaña hasta las diez casas individuales.
Debido a la complejidad del terreno, todos los materiales de construcción fueron transportados manualmente hasta la montaña. Con el fin de mejorar la eficiencia de la construcción y minimizar el daño a las formaciones rocosas originales, se adoptó un sistema estructural combinado para cada casa utilizando un objeto con estructura de madera y una plataforma de acero elevada. La madera carbonizada de la fachada se fabricó en el sitio con un proceso simple para reducir el costo.
El diseño de las casas de madera tiene como objetivo armonizar con el paisaje y el ambiente rústico a la vez que contrasta con los edificios de la aldea. Por lo tanto, evitamos los diseños complejos o exagerados y seleccionamos tres formas geométricas básicas. Cada casa sirve como una habitación separada. Los volúmenes de las habitaciones se reducen al mínimo para reducir la sensación de presencia en el medio ambiente y garantizar el confort interior. La fachada, hecha de madera carbonizada, es resistente a la intemperie, y su color y textura hacen que las casas de madera se mezclen con el paisaje sin problemas. Para el espacio interior, se cortan varias ventanas en cada casa según su forma y orientación, introduciendo ricas capas de paisajes circundantes en los volúmenes puros.