Domótica = Domus ('casa' en latín) + Autónomo ('que se gobierna a sí mismo' en griego)
Como su nombre lo indica, la domótica permite que una vivienda pueda funcionar de manera inteligente, respondiendo a los requerimientos y necesidades de sus usuarios a través de sistemas automatizados que mejoren la habitabilidad y el confort de sus espacios, aumentando su seguridad y potenciando a largo plazo el ahorro de energía y dinero.
Utilizando sensores, sistemas motorizados, tecnologías inalámbricas y la integración directa con teléfonos celulares o tablet, la domótica ha llegado para quedarse, y la puedes integrar en tus proyectos de arquitectura –desde su etapa inicial– a través de diferentes sistemas automatizados. ¿Cómo hacerlo? Revisa una serie de soluciones clasificadas por sus beneficios: ahorro energético, confort, accesibilidad y seguridad.