via dezeen Arne Quinze, diseñador del estudio Quinze & Milan, realizó para el festival Burning Man una gigantezca estructura de madera cuyo objetivo era ser quemada como final de la fiesta.
La obra me recuerda al Dunescape realizada por Shop el 2000 para la galería P.S.1. en Long Island y al mural Favela creado el 2005 para la Moss Galery de Nueva York, por los hermanos Campana, a partir del trabajo realizado en la silla Favela (2004).