OTROCAFÉ se encuentra en la planta baja del icónico edificio de la YWCA, en pleno Centro Histórico de la Ciudad de México, un espacio que alberga más de 100 años de historia. El proyecto nació con la intención de ser una propuesta integral de Arquitectura y Diseño, lo que se refleja en su estructura creadora. La decoración del café combina distintos elementos que cumplen un papel importante: el rojo en algunos detalles, la madera en el mobiliario y como elemento distintivo que envuelve el espacio, los muros crudos pigmentados con una pasta a base de cal y la luz cálida y suave que completa la atmósfera.
La fachada del espacio retoma las secciones altas y delgadas del edificio Art Decó que lo alberga. Además replica al interior, parte de su paleta cromática mediante sus distintos acabados. De esta forma OTROCAFÉ, a través de su diseño y materiales, genera un vínculo con el territorio y el patrimonio, con la memoria de su barrio. Su concepto de “otro para otro” es la base de la diversidad y la inclusión y tiene como convicción ver al otro como parte de un todo.
Se trata de un espacio que se presenta para permanecer y contemplar, ofreciendo múltiples opciones. Su objetivo es contribuir a la construcción de un barrio sólido y acogedor que ofrezca un lugar de encuentro cotidiano y forme parte activa de la vida de sus vecinos. En este sentido, busca establecer una fuerte presencia en el centro de la Ciudad de México, fomentando una permanencia barrial que permita consolidar su identidad y su importancia en la comunidad.
Este proyecto surge como una colaboración de prácticas jóvenes en donde Panorama llevó a cabo la parte de arquitectura y construcción; Otrostudio se encargó del diseño; Ramses Viazcan x Veta se encargó del mobiliario; el diseño de Iluminación y fabricación de luminarias lo encabezó Nuumbra Estudio; por su parte, el registro fotográfico se llevó a cabo por Zaickz Moz.
El sitio se despliega como un lugar para permanecer y contemplar en el cual se abre a diversas posibilidades. OTROCAFÉ apuesta por la construcción de un barrio sólido, un sitio que ofrezca un saludo cotidiano y sea testigo de la vida de sus vecinos, logrando un fuerte permanencia barrial en el centro neurálgico de la CDMX.