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Arquitectos: LRO GmbH & Co. KG Freie Architekten BDA
- Área: 20300 m²
- Año: 2020
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Fotografías:Brigida González
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Proveedores: Feco, Ries Akustik, Schwarzwald-Elemente
Descripción enviada por el equipo del proyecto. El edificio de la Biblioteca Estatal de Württemberg, en Stuttgart, es uno de los logros arquitectónicos más destacados de la década de 1960 en el sur de Alemania. El edificio impresiona por su generosa secuencia de espacios, así como por la cuidada elección de materiales y la alta calidad de su ejecución arquitectónica.
El edificio anexo ocupa ahora directamente la esquina de las calles Ulrichstraße y Konrad-Adenauer-Straße. La acera para peatones, que comienza en la avenida arbolada de la Staatsgalerie y termina actualmente en la Ulrichstraße, se ampliará hasta el edificio de Archivo del Estado y es de esperar que continúe más adelante hasta la Charlottenplatz.
El nuevo edificio, que adopta aproximadamente la altura de la cumbrera del Wilhelmspalais, se separa del edificio original para dejar espacio a un camino entre los dos volumenes que permite enlazar desde la Urbanstraße con el nivel inferior del complejo de edificios. Urbanísticamente, el volumen cúbico de la antigua sala de lectura, que ahora ocupa el centro de la nueva plaza, establece una relación con el saliente central del palacio situado al otro lado de la calle. Unos amplios escalones establecen una conexión con el nuevo pavimento a nivel de la calle.
Ahora se puede acceder al edificio por los dos niveles. El nivel inferior albergará también la futura cafetería, que dará a la calle y podrá funcionar independientemente de la biblioteca. La entrada principal a la biblioteca está en el nivel superior. Desde allí, los usuarios acceden al vestíbulo con los mostradores de información necesarios, los puntos de entrada a la zona de acceso controlado, la devolución de libros y un vestíbulo y zona de exposiciones que se abre a la Konrad-Adenauer-Straße. Allí, algunos de los espacios tienen dos pisos de altura, ya que por razones económicas la altura de los techos de los pisos típicos es considerablemente inferior.
En la primera planta, a la que se accede por una escalera dentro de la zona de acceso controlado, la conexión con el edificio antiguo está situada directamente en la parte superior de la escalera. La parte central de la planta está ocupada por estanterías. A lo largo del edificio, a ambos lados, los puestos de trabajo abiertos se alinean en hileras hacia el vestíbulo, con salas administrativas suplementarias enfrente. Un atrio conecta visualmente este nivel con las otras tres plantas superiores. En las plantas segunda y tercera, los puestos de lectura se sitúan a lo largo de las paredes exteriores en zigzag. En cambio, en la última planta, las mesas de lectura se sitúan en el centro, ya que la estructura plegada del tejado permite dirigir la luz natural hacia el centro del edificio.
A primera vista, el nuevo edificio tiene la apariencia de una entidad independiente. El hecho de que constituye un anexo del edificio antiguo queda claro por la elección de los materiales, en los que predomina el hormigón visto moldeado con encofrado de tablas, que crea ecos de lo antiguo en el edificio nuevo.
