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Arquitectos: Aranguren&Gallegos Arquitectos
- Área: 450 m²
- Año: 2019
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Fotografías:Jesús Granada
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Proveedores: Admonter, AutoDesk, Cement Design, Robert McNeel & Associates, Schüco
Descripción enviada por el equipo del proyecto. El Edificio objeto de proyecto, se ubica en la falda sur del Monte Abantos, en la localidad de San Lorenzo de El Escorial. El entorno es de pendientes pronunciadas donde predomina el pino alternando con zonas rocosas o pobladas de jaras. El solar donde ubicar la casa tiene una pendiente continua bastante acusada que desciende desde la parte superior del monte hasta la calle inferior de acceso. En la parte más alta de la parcela, entre los pinos, en dirección este, asoman la Cúpula y las Torres del Monasterio, situación especial que determina en parte la situación de la edificación que se propone. La parcela tiene unas magníficas vistas hacia “Las Machotas” y el Bosque de la Herrería en sus orientaciones Sur y Suroeste que se tiene muy en consideración a la hora de implantar el edificio en la parcela.
La idea principal es conseguir que la casa se integre en el entorno natural del pinar, que se mimetice con el paisaje.Para ello se recurre a una geometría quebrada, fragmentada en una secuencia de pequeños volúmenes encadenados en caída por la pendiente del terreno, consiguiendo una arquitectura acoplada, aplastada sobre el suelo elevándose lo menos posible, sobre todo en la parte alta de la parcela.
La textura y el color exterior de la construcción, de acero corten, oxidado, hacen que se funda con el terreno de piedra granítica grisácea y oscurecida por la erosión y los líquenes adheridos a ella, así como con las tonalidades rojizas de los troncos de los pinos.
La edificación se posiciona según un eje longitudinal norte-sur en el centro de la parcela, siguiendo la línea de máxima pendiente. Mediante diferentes niveles en su interior va ascendiendo por el terreno acoplándose a las curvas de nivel, sorteando rocas y pinos, retorciéndose para asomarse a las mejores vistas.
La casa se abre mediante grandes perforaciones a la mejor orientación para el largo invierno de San Lorenzo, la Suroeste, igual que la Fachada de las Celdas de los Frailes del Monasterio. De esta manera el último rayo de luz y calor del día más corto del año incide sobre la fachada. A la vez, pensando en el verano, en la parte más alta, donde se ven las Cúpulas del Monasterio, la casa se revuelve hacia el Noreste, creándose un porche de amplias dimensiones enfocado al Monasterio y abierto en dos frentes para aprovechar las frescas corrientes del pinar.
La zona más baja de la casa, planta -1 contiene despacho, cuarto de juegos, taller de trabajo, dormitorio y baño de invitados, distribuidor, cuarto de lavado, bodega-tratero y cuarto de instalaciones. La cota de acceso principal al interior de la vivienda divide claramente la zona de dormitorios a la izquierda de la zona de cocina y salón comedor a la derecha, siendo esta última la más alta y con mejores vistas de la vivienda. Todo el sistema envolvente (cerramientos y cubiertas inclinadas) se resuelve con solución única de acabado de acero corten. Con este material predominante y el particular diseño de la vivienda muy acoplado a la pendiente del terreno, se pretende conseguir integrar la edificación con su entorno.