La vivienda siempre será un tema y un desafío para los arquitectos. Pensarlo de manera que sirva a toda la población y en contextos más precarios es una de las tareas más complejas y quizás imposibles de consolidarse plenamente. Cada lugar y familia siempre pondrá diferentes puntos de prioridad en un proyecto, por lo que recurrir a una solución estándar no es lo ideal. Sin embargo, varias propuestas presentan posibilidades de intervención que crean una intrincada costura entre los más diferentes factores: infraestructura básica, programa, deseos propios, estética, presupuesto. Es por eso que reunimos aquí algunos ejemplos brasileños de vivienda asequible, que van desde viviendas unifamiliares hasta grandes bloques residenciales.
Sin embargo, antes de analizar los proyectos seleccionados, nos parece de fundamental importancia prestar atención a un análisis crítico de cuál sería el papel del arquitecto cuando interviene en estos espacios. Es por eso que planteamos una pregunta importante de Paola Berenstein Jacques, la cual está presente en su artículo Estética das favelas: “Desde el caso más extremo donde la favela fue removida y sus habitantes reubicados en urbanizaciones cartesianas modernistas, hasta el caso actual más leve, donde los arquitectos de la llamada posmodernidad comenzaron a intervenir las favelas existentes para transformarlas en barrios, la lógica racional de los arquitectos y urbanistas sigue siendo prioritaria y terminan imponiendo una estética propia, que casi siempre es el de la llamada ciudad formal. La favela debe convertirse en un barrio formal para que sea posible una mejor integración con el resto de la ciudad. ¿Pero las favelas no forman parte de la ciudad desde hace más de un siglo? ¿Es necesaria esta integración formal?"
Con estas preguntas en mente, te invitamos a revisar algunos de los proyectos publicados previamente en ArchDaily que traen diferentes formas de pensar e intervenir en contextos más populares, desde favelas hasta zonas rurales, acompañados de textos tomados de sus memorias descriptivas.
La Casa Vila Matilde es probablemente el ejemplo más conocido de una exitosa intervención realizada por arquitectos en comunidades. Aquí, Terra e Tuma Arquitetos Associados se apoyó en su propia experiencia en estructura y bloques vistos, para posibilitar una obra de bajo costo, con mayor control y agilidad. Según ellos, el mayor desafío fue la fase inicial de la obra: cuatro meses de demolición cuidadosa de la antigua casa, mientras se construían los cimientos y soportes que sostenían las casas vecinas, sustentadas en sus muros perimetrales.
A los seis meses de iniciada la construcción de la mampostería, la casa se concluyó. El spotlight se encuentra en el área central de la casa, se trata de un patio que cumple la función esencial de iluminar y ventilar las habitaciones de la residencia.
El Colectivo LEVANTE fue el responsable de las obras de la Casa no Pomar do Cafezal. En ella, el clásico bloque de 8 huecos determina la materialidad de la casa, asentado únicamente en horizontal y dejando ver su cara de pedrería. Algo muy inusual en la colina, ya que colocar el bloque en posición vertical es más rápido y hace que el material rinda más. Según los arquitectos, la idea era garantizar una mejor inercia térmica de la casa, ya que con una instalación horizontal, el ancho del muro corresponderá a la mayor dimensión del bloque. Además, este elemento modular fue explorado de diferentes formas, en algunas situaciones aparece como cobogó o combinado con bloques de concreto, por una necesidad estructural.
Así, se mantuvo el repertorio constructivo tan propio de los esfuerzos colectivos, en cuanto a la estructura y los muros de ladrillo aparente, lo que se destaca del proyecto es la atención que se da a las cuestiones relacionadas con el flujo del agua de lluvia y su absorción en el suelo; la búsqueda de una generosa ventilación e iluminación natural, además del control de la temperatura con elementos ligeros y vegetación.
En la provocación de pensar la vivienda como un espacio honesto para quienes la ocupan, la arquitectura que NEBR concibió, se inserta en un contexto más rural, las Casas Populares Paudalho. Se erigieron en modestos lotes de 8m x 20m y se ejecutaron con mano de obra local poco calificada, dando como resultado un tiempo de construcción de apenas 120 días.
Aquí, “el partido arquitectónico viene de la sombra, al gravitar cierto ritmo sustancial a la caligrafía precisa de las líneas rectas en el equilibrio formal. La escasez de contornos suaves preside la altivez por puntos y aristas en el refinamiento geométrico. El proyecto re-cuestiona dimensiones hostiles y principios enérgicos de economía espacial estigmatizados a la casa popular. En el disfrute del vacío construido desde el diseño en altura, el cielo se convierte en el horizonte porque había poco terreno."
Ante una situación precaria existente, configuradas por casas de madera o mampostería autoconstruidas, de una o dos plantas, erigidas en zonas con riesgo de deslizamientos, inundaciones y contaminación. La Urbanización del Jardim Vicentina, realizada por Vigliecca & Associados, preveía el retiro y reubicación de los habitantes de las zonas más críticas, a orillas del arroyo. La implementación de tres tipologías diferentes, agrupadas linealmente a lo largo del arroyo canalizado, definiendo dos nuevos frentes urbanos a cada lado del eje de vía de servicio propuesto.
En él se optó por el método constructivo de bloque cerámico estructural aparente, para un mejor desempeño termoacústico y fachadas de bajo mantenimiento.
Realizado también por Vigliecca & Associados, el Residencial Parque Novo Santo Amaro V tuvo como directriz general la creación de un eje central verde a lo largo del curso de agua existente, rescatando el estado original en la región de los manantiales de la presa de Guarapiranga. “El proyecto construye varios 'portales' aumentando el número de accesos al parque lineal y reduciendo el aislamiento del interior en relación con su entorno del parque."
Según los arquitectos, “las familias retiradas del sitio serán reubicadas en unidades habitacionales creadas en la misma zona, con mayor cantidad de departamentos que atenderán la demanda de otros sectores de la región, que también se encuentran en zonas de riesgo."
Otro ejemplo es la Re-Urbanización de Sapé, que atiende a 2.500 familias en condiciones precarias de vivienda en el barrio Rio Pequeno. Realizado por las oficinas de Base Urbana y Pessoa Arquitetos, el proyecto se estructura a partir de la costura urbana entre las dos márgenes del arroyo desde el diseño de los espacios públicos, convirtiéndose en una herramienta de inclusión ya que sus acciones diseñan espacios de conexión, encuentro con la vida social, experiencias e intercambio en el espacio público urbanizado.
“El proyecto proporciona una fuerte permeabilidad entre los espacios públicos, los espacios colectivos y los espacios privados. (…) El edificio contempla siete tipos de unidades habitacionales, además de unidades comerciales y de servicios. La cantidad de cada tipo se definió encuestando a las familias a lo largo del proceso. El sistema constructivo adoptado fue optimizado con la estandarización de huecos para puertas y ventanas, muros hidráulicos con aplomos fijos y ventilación cruzada prevista. La circulación horizontal colectiva en terrazas transpuso un espacio habitable existente en los callejones de la favela al pavimento, creando la oportunidad de intercambio entre familias en el mismo piso."
El Residencial Alexandre Mackenzie forma parte de las acciones de urbanización de la Favela Nova Jaguaré en São Paulo con el objetivo de realizar parte del reasentamiento de familias que viven en áreas de riesgo. Realizada por Boldarini Arquitetos Associados, la implementación del complejo explora la relación entre el espacio público y privado al proponer caminos, callejones y áreas de uso colectivo que se integran con las calles circundantes, permitiendo nuevas conexiones con el tejido existente.
“El conjunto está compuesto por dos soluciones arquitectónicas, edificios y casas superpuestas, cuyo principal elemento de organización es la disposición de los espacios comunes directamente relacionados con las estructuras de circulación, conformando espacios de continuidad a la casa.”
Por su parte, el Residencial Corruíras fue construido para posibilitar el reasentamiento de los habitantes de la Favela Minas Gerais, en São Paulo, ocupación irregular aledaña a la obra. Proyectado por Boldarini Arquitetos Associados, el conjunto está ubicado en un terreno con fuerte pendiente cercano al arroyo Água Espraiada, ofreciendo una oportunidad única para la percepción del relieve y el paisaje.
En el proyecto se valoró la circulación horizontal con pasarelas como elemento estructurador y articulador del conjunto para reforzar la idea del espacio colectivo como lugar de intercambio, en referencia al balcón presente en la “casa brasileña” que mira al patio interior.
Finalmente, el SEHAB Heliópolis, creado por Biselli Katchborian Arquitetos, ocupa la periferia de la manzana formando un patio interior de acceso público, destinado al ocio de los vecinos del conjunto.
Aquí se aprovecha la topografía del terreno para maximizar el número de viviendas con acceso a diferentes niveles que se conectan mediante pasillos, cuya solución de estructura metálica las hace únicas en el conjunto y configuran las zonas de ocio cubiertas del conjunto. La distribución de las unidades y el uso de los colores fueron determinantes para la lectura del conjunto como torres únicas, sin embargo, se mantiene la noción de conjunto.