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Arquitectos: Corinne Mauas, Daniela Ziblat, Hauser Oficina de Arquitectura, Mara Steinberg
- Área: 2015 m²
- Año: 2017
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Fotografías:Albano García
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Proveedores: Antoliche, Arien Clima, Ascensores: HOCH, AutoDesk, CONSES, CUEVA DE LAS MANOS, Estudio Iluminacion, FARTON INSTALACIONES, Grupo MSH, Seel Servicios Electricos, Sky windows, Triangular
Descripción enviada por el equipo del proyecto. El proyecto está emplazado en el barrio Colegiales de la Ciudad Autónoma de Buenos Aires. Es una zona que se caracteriza por su espíritu de barrio bajo con verdes pulmones y arboledas.
El edificio cuenta con 15 unidades de variadas tipologías. Este toma el ancho total del terreno atravesando tres volúmenes que se van escalonando en menor altura hacia el pulmón de manzana y tiene jardines y terrazas verdes que garantizan vistas abiertas para las distintas unidades. Las viviendas tienen generosas expansiones, ya sean jardines, terrazas verdes o balcones terraza dotándolas de una fuerte relación interior-exterior.
El volumen más cercano a la línea municipal se desarrolla en planta baja y cuatro pisos, tomando la altura límite de la manzana, entrando en dialogo con las construcciones del entorno y la ciudad. Este bloque se encuentra atravesado por un vacío que conforma la circulación principal del proyecto y contiene una mixtura de escaleras, pasarelas, jardines verticales y patios que enriquecen los espacios comunes.
Los dos volúmenes que se adentran en el pulmón de manzana conforman casas apaisadas que se apropian del ancho del terreno, potenciando de esta manera las vistas abiertas, el asoleamiento y la relación de los espacios interiores-exteriores.
La estructura se ordena en módulos que organizan la diversidad de tipologías permitiendo flexibilidad en las plantas para adaptarse a las distintas necesidades. En sectores de estar y dormitorios las losas están planteadas sin vigas para aportar versatilidad a los espacios.
La fachada a la calle se materializa con un tamiz de parasoles verticales que definen la identidad del edificio y aportan privacidad a las unidades al frente y contiene los espacios interiores enmarcando las visuales hacia la arboleda que ofrece la calle Conde.
