Supra Order es una investigación en curso orientada al estudio de las posibilidades operativas y performativas del orden. El proyecto se presenta como una colección de plantas del tipo archivo acumulativo que intensifica y reivindica la existencia de un lenguaje arquitectónico común, atemporal y universal. Curado por Iñaki Harosteguy, Supra Order hace de la comparación un mecanismo crítico para relacionar, vincular y establecer nexos entre diversos proyectos arquitectónicos que operan a través de soportes arquitectónicos neutros y radicales, basados en grillas isotrópicas. De alguna manera, las herramientas metodológicas relevadas y expuestas por Supra Order, conforman una especie de manifiesto que busca recuperar la autonomía disciplinar como referencia fundamental de la practica contemporánea.
Buscando indagar sobre los inicios y las intenciones del proyecto de investigación, aprender sobre sus mecanismos de análisis y clasificación, conocer su posición frente a la historia y descubrir las obras propias donde ensayan, en diferentes escalas, las estrategias estudiadas, realizamos la siguiente entrevista con Iñaki Harosteguy, fundador y curador de Supra Order:
Belén Maiztegui (BM): En primer lugar, nos gustaría conocer un poco sobre los inicios y el enfoque del proyecto ¿Qué es Supra Order? ¿Cuáles fueron los motivos que impulsaron la creación de este archivo acumulativo de plantas?
Iñaki Harosteguy (SO): Supra Order es una investigación académica iniciada en el transcurso del Máster en proyecto arquitectónico avanzado de la ETSAM (MPAA9) durante el año 2018, donde de manera un poco ingenua e intuitiva comenzamos a vislumbrar relaciones subyacentes en el modo de proyectar de una generación de arquitectos que emergía desde el anonimato a principios del nuevo siglo. Esta serie de prácticas alrededor del mundo como Office KGDVS, Dogma, Pezo Von Ellrichshausen, Productora, XDGA, e2a, Muoto y Fala entre otros; compartían la idea de que la crisis global era una oportunidad para “hacer más con menos” (1) significando una fuerte reflexión crítica hacia donde se había dirigido la arquitectura a fines de siglo XX. Un retorno consciente a las bases de la disciplina como referencia fundamental de la práctica arquitectónica y argumento de resistencia frente a las contingencias que el nuevo mundo imponía.
Esta tendencia historiográfica prefiere trabajar con herramientas ya probadas, con la re-circulación de arquetipos y estructuras conocidas como estrategias pragmáticas ante una urgente necesidad de recuperar la producción cultural abandonada en los últimos años por conseguir resultados inmediatos y superfluos. Se produjo entonces un interés renovado por el dibujo arquitectónico y la composición racional en planta, operando sobre soportes regulares, geometría estricta y grillas neutras para acercarse al rigor técnico, la construcción y la eficiencia encontrando en la limitación que la economía de medios supone un estímulo creativo. Nos gusta pensar que Supra Order es una forma de entender la arquitectura, sus bases más elementales, su código genético y sus lógicas relacionales a lo largo de la historia.
BM: Después de acumular, manipular y exponer cientos de plantas, incluyendo obras de períodos y autores muy diversos como Jean Nicolas Louis Durand, Louis Boullée, Louis Kahn o Mies Van der Rohe ¿Cuáles dirían que son los criterios básicos de orden (o reglas mínimas y necesarias) que determinan la selección de cada proyecto?
SO: Al mismo tiempo que recolectábamos documentos gráficos de oficinas contemporáneas, comenzó un proceso arqueológico en busca de linajes y ramificaciones históricas en retrospectiva, lo que nos llevó a poder vincular a Pezo Von Ellrichshausen con los arquetipos de Kahn, las composiciones de Durand y el conjunto de Villas Palladianas o a Dogma con los trabajos previos de Alberti, Ungers, Hilberseimer, Mies Van der Rohe, Aldo Rossi y Archizoom por nombrar algunos ejemplos de familias que establecen diálogos permanentes en la cultura arquitectónica. En todos los casos, abstrayendo su época, lugar y uso, subyacía siempre un fuerte apoyo compositivo en la grilla regular como el instrumento con el que elaborar el proyecto arquitectónico, un seguro contra la arbitrariedad como dijo alguna vez Le Corbusier, o simplemente la herramienta más elemental del diseño, el soporte del pensamiento lógico, sistémico y racional del ser humano.
Una serie de principios y condiciones que conforman su ADN: abstracción, neutralidad, repetición, aescalaridad e isotropía, traducen el funcionamiento de las grillas como sistemas rígidos, pero al mismo tiempo abiertos e indeterminados. Cuadrículas, sistemas de repetición, regularidad, equidistancia, ritmo, todo se encuentra allí de manera explícita, como un fondo neutro, abstracto, homogéneo, silencioso y expectante para ser reutilizado una y otra vez. La acumulación, manipulación y combinación de cientos de plantas organizadas sobre grillas isotrópicas nos permitieron enunciar una serie de nueve estrategias genéricas y atemporales de orden estricto, las cuales habilitan infinitas posibilidades al operar desde la lógica y la razón (la definición de cada una de ellas puede leerse en el sitio web de Supra Order):
- Bosque de columnas
- Marcos inespecíficos
- Matriz de unidades
- Muro tecnificado
- Pilar espacial
- Ritmo perimetral
- Cuadrado elemental
- Soporte geométrico
- Soporte compositivo
BM: El proyecto hace una abstracción de todos los aspectos que son irrelevantes al orden geométrico: no da pistas sobre la configuración material, el estilo, o la función de la obra que se está exponiendo. Al despojar a los proyectos de todas estas otras cualidades, se evidencia que existe una continuidad geométrica subyacente que es indiferente a la ubicación geográfica o al período histórico al que pertenece la obra. ¿Creen que es posible definir una gramática común atemporal o un lenguaje arquitectónico universal? ¿Cómo se posiciona Supra Order frente a la historia?
SO: Estamos convencidos de que la arquitectura es universal y posee un lenguaje propio al igual que otras disciplinas como las matemáticas, donde a través de axiomas y razonamientos lógicos estudian la relación entre números; la informática y su lenguaje de programación, a través del sistema binario de ceros y unos; o la música y su infinita capacidad combinatoria con sólo siete notas siguiendo los principios fundamentales de la melodía, la armonía y el ritmo. Estos lenguajes poseen una gramática propia, un conjunto de normas, reglas y estructuras que definen una sintaxis combinatoria de sus elementos primarios. En la arquitectura sucede lo mismo, Jean Nicolas Louis Durand fue uno de los primeros teóricos en utilizar la metáfora del lenguaje propio de la arquitectura considerando al dibujo como el medio por el cual se expresaba. Durand fue quien supo reconsiderar el legado clásico y transformarlo en un sistema de composición operativo al sistematizar el proceso combinatorio de puntos, líneas y figuras sobre un soporte cuadriculado y permitir infinidad de configuraciones lógicas entre las partes. Continuando el legado iniciado por Durand, Mies Van der Rohe consideraba como la tarea más importante de nuestro tiempo desarrollar una gramática que todo el mundo pudiese utilizar de manera objetiva: “Lo que intento desarrollar es un lenguaje común y no ideas personales” (2)
A lo largo de la historia se han producido diversos caminos, puntos de inflexión y experimentos subjetivos esporádicos, pero siempre ha sobrevivido por debajo y de manera continua un factor común que no discrimina culturas tectónicas, contextos socio-económicos ni modas pasajeras. El poder gramatical de la grilla se ha mantenido inalterable y avasallante desde Mileto a Manhattan, su abstracción, simpleza racional y condición aescalar la han convertido en “el único elemento que puede orquestar el diseño de todo” (3) como manifiesta Pier Vittorio Aureli en total sintonía con Mies y Durand. Grandes arquitectos como Andrea Palladio, J.N.L Durand, Schinkel, O.M.Ungers, Mies, Hilberseimer, Aldo Rossi, Superstudio, Archizoom y actualmente el crítico Aureli, entre tantos otros, han hecho un gran esfuerzo en su trayectoria en pos de clarificar, documentar y proyectar un lenguaje arquitectónico atemporal y universal, unas condiciones mínimas de orden genérico y transferible, común y al alcance de todos. En este sentido Supra Order es un humilde intento por reunir e intensificar el trabajo realizado para visibilizar las bases gramaticales de la disciplina en un contexto de exceso de información y confusión.
BM: La adaptabilidad y la flexibilidad que habilita el uso de la grilla es ampliamente visible en algunos ejemplos históricos, donde el orden y la rigidez estructural en realidad permiten el desarrollo de una mayor libertad de uso. En una reciente presentación, comentaron que “Supra Order alienta la imposición de un orden, pero solo para que vuelva a aparecer en él, la vida o el desorden”. ¿Podrían profundizar sobre este tema? ¿Cuál es su posición frente a la dicotomía orden / libertad?
SO: Existe una falsa creencia de pensar que el orden es restrictivo, aburrido y limitante, o peor aún, que atenta contra el libre desarrollo de la creatividad. Muy por el contrario, creemos que como en todo gran juego y en toda buena arquitectura, en general, una mínima serie de reglas –constricciones positivas- plantean posibles desafíos y activan el proceso cognitivo obligándonos a pensar, experimentar y desarrollar la creatividad. Esta investigación intentaba a la vez validar la paradoja que sugiere que a mayor orden y rigidez estructural se alcanza mayor flexibilidad espacial y adaptabilidad frente a futuras contingencias alargando así la vida útil de los edificios. Supra Order busca posicionarse entre el orden estructurante de la arquitectura y la condición contingente de la sociedad, plantándose de manera firme pero indeterminada, con el afán de derrumbar la falsa convicción de que la arquitectura debe ser totalmente libre para poder crear libertad; por el contrario creemos que el establecimiento de un mínimo orden general habilita mayores niveles de convivencia y por lo tanto mayores libertades individuales –principio democrático-.
La esencia de este entendimiento reside en la dialéctica de polos opuestos donde orden y desorden juegan constantemente buscando un equilibrio antagónico entre controles y libertades. El orden de fondo se manifiesta ahí, pero al mismo tiempo es interrumpido por fragmentos de desorden. Es importante destacar que la grilla de fondo no es perfecta ni absoluta, su estricta disciplina es capaz de alterarse por irregularidades del contexto y sorpresas de la vida. Aunque sostiene siempre una fuerte voluntad de orden, reconoce las fuerzas geográficas y sociales que se resisten a ella. Su singular combinación de rigor disciplinar y versatilidad establece las condiciones para dejar espacio a la interacción y la probabilidad, al encuentro y al desorden espontáneo, en definitiva, al libre desarrollo de la vida misma. Podríamos decir que proyectar arquitectura es, en verdad, construir el telón de fondo para que las cosas sucedan. Es orden para el desorden.
BM: Además de la investigación en curso, enfocada en las posibilidades operativas y performativas del orden, nos gustaría poder conversar sobre las obras y proyectos propios de Supra Order, donde ensayan en diferentes escalas las estrategias estudiadas ¿Podrían contarnos sobre las propuestas “From ring to Grid”, “Una forma para el bosque” y la “Casa con columnas”?
SO: Estos tres proyectos son representativos de una serie mayor de intervenciones en el marco de Supra La Plata entendiéndolo como un escenario fértil para indagar los temas y estrategias de Supra Order sobre el territorio. Las condiciones geométricas y compositivas que dieron sustento a la planificación de la Ciudad de La Plata en 1882 sentaron las bases de una nueva ciudad higienista y republicana organizada bajo una serie de reglas de juego genéricas y específicas, ordenadoras y al mismo tiempo liberadoras las cuales permitieron un desarrollo sostenido y heterogéneo a lo largo de su corta vida demostrando la versatilidad y supervivencia del sistema soporte: la retícula Hipodámica. 139 años después las lógicas de la grilla fundacional subyacen con la misma intensidad dentro del casco pero no han sabido extenderse en busca de nuevos horizontes por lo que la ciudad expandió sus límites de manera desorganizada y fragmentada.
1. From ring to grid (2018)
Se trata de un proyecto crítico urbano que se propone actualizar el plan fundacional en un nuevo plan infraestructural para los próximos 100 años redefiniendo a su vez la forma de la ciudad en una nueva imagen simple y clara a través de mínimas acciones. A partir de comprender sus lógicas históricas, productivas y geológicas, se detecta al espacio intermedio entre el casco fundacional y la periferia como una gran oportunidad. Paradójicamente el primer límite de la ciudad, un anillo perimetral de circunvalación vehicular, que intensifica las diferencias entre interior/exterior o casco/periferia es entendido como un elemento autónomo con gran potencial de instrumentalización debido a su forma cuadrada perfecta y autonomía.
La estrategia consistió en operar desde la repetición de este anillo cuadrado, multiplicando el elemento hacia todos sus lados, conformando una grilla regular, neutra y sin jerarquías de nueve cuadrantes iguales, que de alguna manera reinterpreta el uso de la grilla fundacional de un modo más genérico. La nueva ciudad queda inscripta en un mosaico de nueve espacios iguales e inespecíficos a la vez para ser llenados de distintas maneras; es decir nueve escenarios posibles que reflejen la inestabilidad propia de la vida; estableciendo el carácter fijo como también el flexible de la ciudad, el factor determinante del “marco” y lo impredecible de su “contenido”. Las nuevas líneas de la ciudad se reinterpretan como grandes infraestructuras lineales para ser invadidas por la sociedad, soportes relacionales indeterminados que atienden a la contingencia local manteniendo una continuidad general. Al mismo tiempo la definición de estos perímetros radicales tiene como objetivo enmarcar el territorio generando una ciudad densa y compacta en contra del éxodo a las periferias.
Por otro lado el proyecto plantea una reflexión sobre el medio físico en el que vivimos entendiendo la ciudad como un ente vivo íntimamente relacionado con la naturaleza, un “nuevo ecosistema híbrido” que pretende tanto artificiar el medio como potenciar sus propias lógicas, una especie de paisaje construido por sustratos técnicos y geológicos hacia una nueva topografía. En definitiva se trató de actualizar modelos genéricos de la arquitectura, en este caso el uso de la grilla, en contextos específicos estableciendo un soporte neutro para una ciudad propia del siglo XXI: compacta, densa, heterogénea, poli céntrica y equilibrada, sintetizando a su vez arquitectura, infraestructura y urbanismo en un único gesto muy claro que resuelve problemáticas a todas las escalas con una mínima cantidad de acciones.
2. Una forma para el bosque (2019)
El Bosque de la Ciudad de La Plata, pensado como el pulmón verde de la nueva ciudad higienista ha sufrido una secuencia ininterrumpida de asaltos a su territorio difuminando sus límites y reduciendo su superficie a más del 50%. Este proyecto busca mediar entre la tensa relación existente entre el espacio vacío y el ineludible avance del espacio construido de la ciudad. El proyecto busca redefinir el bosque en una forma simple y clara, autónoma y reconocible, un cuadrado perfecto de 800m de lado que encuentra su lógica geométrica en la grilla fundacional de la ciudad generando una pieza arquitectónica de escala metropolitana capaz de resistir al paso del tiempo. La reinterpretación y materialización de sus límites serán la génesis del proyecto. Estos espacios lineales intermedios actúan como perímetros inclusivos siendo el nexo entre el espacio vacío y el espacio construido de la ciudad, permitiendo por un lado integrar y conectar, pero también separar y tensionar a otras escalas.
Dos torres genéricas de usos mixtos emergen sobre el horizonte y encuadran el Río de La Plata estableciendo nuevos vínculos y relaciones entre la ciudad y su potencial soporte hídrico históricamente olvidado. Estos nuevos monumentos significan un claro gesto por redensificar los centros urbanos en contra de la dispersión hacia las periferias. Este proyecto reduce la arquitectura a delimitar un territorio como acto fundamental, enmarcar un vacío urbano y protegerlo como manifiesto para alcanzar una metrópolis sostenible.
3. Casa con columnas (2021)
Es un proyecto a escala doméstica que de alguna manera presentaba una gran oportunidad de pensar y desarrollar un sistema abierto y extrapolable más que una tipología de vivienda acabada. A partir de las estrategias de Supra Order se buscó trabajar con una serie de reglas autoimpuestas que activen relaciones lógicas entre las partes manteniéndose al mismo tiempo flexibles, como una especie de juego que posibilita infinitas formas de jugarlo. El proyecto es una especie de revisión de la Casa de Campo en formato genérico reinterpretando el sistema de galerías como espacios intermedios. Al mismo tiempo introduce elementos arquitectónicos de los templos clásicos –pilar/dintel- y opera con lógicas rítmicas espaciales de las mezquitas a través del sistema de organización del “Bosque de Columnas”.
La casa con columnas es simplemente una estructura espacial indeterminada y performativa que busca cualificar sus espacios introduciendo determinados dispositivos técnicos para transformarla en una infraestructura habitable. En su interior se libera por completo el uso de la planta permitiendo que el usuario pueda habitarla como desee y que el espacio pueda relacionarse hacia ambos patios por igual generando una continuidad espacial fluida a través de ella.
Conoce más sobre los trabajos e investigaciones de Supra Order a través de su sitio web o sus redes sociales.
NOTAS
(1) Aureli, Pier Vittorio. “Menos es suficiente”. Gustavo Gili. 2016.
(2) Conversaciones con Mies van der Rohe. Gustavo Gili, 2006. Traducido de “Conversations with Mies” en Peter, John. The oral history of modern architecture: interviews with the greatest architects the Twentieth Century, Harry N. Abrams, New York, 1994.
(3) Aureli, Pier Vittorio: “Más y más sobre menos y menos” en PLOT 31, Piedra, Papel y Tijera S.A., Buenos Aires, 2016. p.183
