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Arquitectos: Andrade Morettin Arquitetos Associados
- Área: 1786 m²
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Fotografías:André Scarpa
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Proveedores: Hunter Douglas, Artalum, Deca, Fernando Jaeger, Iguzzinni, Novidario, Ovo, Paulo Alves, Pertech, REFAX, REKA, Riccó, Securit, Veda
Descripción enviada por el equipo del proyecto. El concurso para proyectar una nueva biblioteca en el Colegio Santa Cruz -una de las importantes escuelas tradicionales de São Paulo- surgió durante el proceso de modernización y reestructuración de su campus, cuyo objetivo era revisar y discutir la relación de los espacios arquitectónicos con las nuevas prácticas pedagógicas. La biblioteca original, ubicada en el centro de la escuela, ya no correspondía a las demandas actuales de la comunidad, debido a sus limitaciones espaciales internas y poca integración con la generosa área libre a su alrededor.
La propuesta del proyecto consiste en la vista integral del complejo de edificios y las áreas libres del campus. Conduciendo al concepto de intervención que contribuye al medio ambiente, por delante de la apreciación del desempeño del edificio como un objeto aislado.
La visita al sitio permitió comprender importantes dinámicas ocupacionales, así como áreas libres utilizadas para proporcionar espacios de vida e interacción social. La comprensión de la dinámica se volvió esencial para el desarrollo del proyecto y la reordenación del programa. La planta baja como espacio libre es uno de los aspectos más importantes para el flujo de personas y la socialización, fortaleciendo el aspecto de un espacio de encuentro.
El espacio principal de la biblioteca se coloca en el piso superior, se conserva y se suspende sobre el suelo. En la planta baja se reubicaron las salas de computadores y "maker", componiendo el núcleo cercano. En consecuencia, las actividades animadas se realizan fuera del espacio de la biblioteca, que se encuentra en el piso superior. Las salas administrativas y áreas de control de sitúan en la entreplanta. Junto a esta área, toda la biblioteca tiene doble altura de techo, proporcionando un espacio amplio y flexible, aspectos que guiaron el proyecto.
El núcleo de servicios y circulación vertical se hizo más completo. Además de eso, se reubicaron núcleos en la fachada, proporcionando ventilación e iluminación natural. Para contribuir a la apreciación compleja, se identificó un aspecto destacable en la distribución del suelo, un patrón geométrico claro presente en la urbanización y el paisajismo. De esta observación surge la idea de conceptualizar un edificio a través de formas geométricas simples. Permitiendo la inserción armoniosa del nuevo edificio en el campus de Santa Cruz.
El edificio se organizó como una serie de plazas, lo que proporcionó flexibilidad a las actividades. Además, el concepto de estructura se proyectó partiendo de una rejilla simple, sin grandes vanos, permitiendo la volumetría ligera, además de la construcción rápida y económica.
La propuesta del sistema constructivo está compuesta por un reducido número de elementos industriales. Su estructura parte de una rejilla simple, sin grandes huecos, lo que permite, al mismo tiempo, que su volumetría se muestre ligera y que su construcción sea rápida y económica. La superestructura es mixta, con perfiles de acero y losas-paneles prefabricados de hormigón; cierres con marcos de aluminio y vidrio; tabiques internos de yeso y vidrio; y acabados con componentes también industrializados.