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Arquitectos: Arquitetura Bossa, Bloco B arquitetura
- Área: 52 m²
- Año: 2019
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Fotografías:Camila Alba Costa Curta
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Proveedores: Ajover, AutoDesk, Casas da água, GRAPHISOFT, Giacomossi, Madeireira Lokal, Marcos carpintaria, Métrica engenharia, Suvinil Tintas, Tigre, Wetzel
Descripción enviada por el equipo del proyecto. El proyecto del espacio cultural Casa Ventana fue desarrollado para reemplazar el garaje de la residencia del artista con una escuela de carrocería y un espacio para presentaciones. Algunas premisas condicionaron las opciones de diseño: durabilidad y resistencia debido a la necesidad estética de representar un edificio seguro; relación con el entorno inmediato; tiempo de ejecución y restricción presupuestaria. La casa cultural y la casa donde viven los artistas se encuentran en el primer piso.
La casa preexistente en el sitio hecha de madera premoldeada se enfrenta a sí misma. Así, la casa cultural se impone en forma y dimensión para indicar dónde está el lugar que recibe al público. Entre los edificios se encuentra el punto más alto del nuevo edificio, de 7 metros de altura, el muro de hormigón define el límite físico entre vivir y practicar. La forma triangular se definió para crear una cubierta que dirige el flujo de lluvia a la parte permeable de la tierra.
En él, se eligió el uso de la baldosa metálica porque permite una inclinación menor, haciendo que el punto medio donde se cuelga el equipo de circo alcance una altura más alta. Los cierres y aberturas fueron diseñados de acuerdo con la implementación. De esta manera, se crearon dos fachadas ubicadas al norte con losas de concreto para cerrarse al período más largo de luz solar y definir la forma y la materialidad del edificio. Mirando hacia el sur, las otras fachadas se abren lo más posible hacia el exterior, conectando el edificio con la vegetación circundante. En estas fachadas, se puede aprovechar las amplias aberturas para maximizar la iluminación natural y los vientos recurrentes.
Los marcos tienen un papel importante de diálogo entre el espacio interno y externo, su materialidad aporta organización, permeabilidad y ligereza en contraste con la resistencia y el peso del hormigón. Fabricados en madera por un artesano, están cerrados con baldosas de policarbonato que les permite ser ligeros y fáciles de manejar. La elección del material sobre el vidrio ha reducido considerablemente el valor del trabajo. Las aberturas basculantes funcionan con un sistema de cuerda y las puertas de las ventanas sirven como cubierta para expandir el espacio interno. La necesidad de un amplio espacio para actividades corporales permite diferentes formas de ocuparlo tanto en clases como en presentaciones.
Para dimensionar el espacio, se estudió el rango de movimientos, debido a la ocupación en la superficie horizontal y también en el vacío vertical utilizado por los cuerpos en el equipo aéreo. Al ingresar, el usuario debe quitarse los zapatos. No hay separación de ambientes, todo es un aula, todo es un escenario, todo es una audiencia. La calidez y la textura de la madera en el piso invitan a todos a sentarse y mezclarse con la escena iluminada por el sol al final del día. En el fondo, la vegetación se ve distorsionada por la forma redondeada de las baldosas, que define un límite sutil entre el espacio interno y externo.
La cabeza acompaña al cuerpo danzante, el piso, las paredes, el techo, observa todo el espacio en poco tiempo, domina el espacio con la mirada, el olor y el tacto. Las "Ventanas" están cerradas: el diálogo entre vidrio, naturaleza y arquitectura toma forma.