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Arquitectos: ARK-architecture, AUDA
- Área: 7 m²
- Año: 2018
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Fotografías:Bilel Khemakhem
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Proveedores: GRAPHISOFT, Italgraniti, TPR ALUMINIUM, TROSIFOL, Trespa, Trimble
Descripción enviada por el equipo del proyecto. Vitalcube es un edificio de consultorios médicos, ubicado en "Les Berges du Lac 2" en Túnez, un área con una gran cantidad de clínicas y centros de bienestar. Para este tipo específico de proyectos que darán la bienvenida a pacientes en busca de curación, queríamos que el concepto presentara una contribución positiva en la psicología de los operadores. Y así es como a través de la naturaleza, buscamos inspiración. Se han elegido 3 elementos principales para que se reflejen en el volumen del proyecto: agua, vegetación y sol, dividiéndolos en tres pabellones cúbicos, ensamblados por un atrio inundado de luz natural.
Las circulaciones interiores siguen dos ejes visuales perpendiculares que perforan todos los niveles en un espíritu de apertura creando una conexión permanente con el exterior. La entrada principal del proyecto, totalmente acristalada en cuatro niveles, mantiene la continuidad visual desde la calle hasta el atrio. Su transparencia ofrece un ambiente agradable y sereno en el hall de recepción.
Las fachadas adoptan un sistema sutil de módulos coloridos, cuidadosamente contrastados, alternando paneles opacos con aspecto de madera y paneles de vidrio transparentes y de colores. Los elementos son transportados por una estructura de aluminio con perfiles de cobertura horizontales azules, verdes y amarillos, que se refieren a los elementos de la naturaleza y marcan la diferenciación de los tres cubos.
El proyecto incluye planta baja comercial y entreplanta, dos pisos divididos en 22 consultorios médicos con superficies entre 60 y 120 metros cuadrados y un piso superior independiente totalmente operado por una clínica yuxtapuesta con el proyecto. Organizado en 11 salas de consulta, una sala de radiología y una sala de ultrasonido, este piso ha sido tratado de manera diferente desde el exterior. Finalmente, a través del diálogo que mantiene con el medio ambiente, la delicada expresión de la naturaleza y las idas y venidas de los pacientes que buscan la recuperación, el proyecto se convierte en un organismo vivo: recibe y da vida. Así es como se convierte en Vitalcube.