La automatización ha llegado hasta nuestros propios escritorios. Si hace algunos años creíamos que la tecnología podría tocarlo todo, menos la especificidad y el detalle del diseño arquitectónico en sí mismo, estábamos equivocados.
Este algoritmo, denominado Finch, genera distintas configuraciones espaciales según parámetros predeterminados, a medida que cambiamos el área total del espacio. Esto ayuda a definir zonas en los estados iniciales del proyecto, los cuales luego podrán ser depurados según los requerimientos específicos del encargo. El algoritmo ha sido desarrollado por BOX Bygg and Wallgren Arkitekter y, por el momento, se puede utilizar a través de Grasshopper.
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