Descripción enviada por el equipo del proyecto. Cuando visitamos el terreno por primera vez, vimos una serie de detalles específicos que nos gustaron mucho, como la presencia de un bosque con especies nativas y la forma natural del terreno en el cual iba a construirse la casa; decidimos desde el principio que la forma topográfica debía conservarse en su totalidad sin ninguna alteración.
La pendiente natural y unas zanjas por donde corre el agua en las épocas de lluvia eran las características morfológicas que no se modificarían, por el contrario, nos hizo pensar que el esquema espacial de la casa debería ser a partir de tres volúmenes conectados por unos puentes. Así el terreno seguiría siendo el mismo. una vez encontrado este camino hicimos varias exploraciones para trabajar el programa arquitectónico de acuerdo a la fragmentación volumétrica. Para los habitantes de la casa esta idea de tener espacios conectados por puentes, pero a su vez totalmente independientes, les pareció muy interesante, sobre todo, para cambiar la relación con el paisaje y el espacio en distancias muy cortas.
Otro aspecto importante en la configuración de la forma geométrica y de la materialidad de la casa fue el clima; la región en la que se encuentra la casa, normalmente presenta temperaturas que pueden ser muy bajas, sobre todo durante la noche. Decidimos hacer un manejo cuidadoso en la proporción y localización de los vanos en los 3 volúmenes buscando un equilibrio térmico. Los vanos a veces continúan hasta la cubierta perforando el plano inclinado para lograr entradas de luz efectivas y crear miradas específicas sobre algunos cerros vecinos y del bosque cercano. En resumen, esta casa es una pequeña pieza de concreto tallada a la medida de sus habitantes y del paisaje que la rodea.