Esta semana arrancó en San Sebastián (España) 'MUGAK', la Bienal Internacional de Arquitectura de Euskadi, un evento inédito en el País Vasco (España) integrado por 115 actividades incluyendo la exposición 'RCR Arquitectes: Creatividad compartida' y conferencias de Rafael Aranda (RCR Arquitectes), Sou Fujimoto, Solano Benítez y Gloria Cabral.
Con motivo de su inauguración, conversamos con Pedro Astigarraga, comisario de esta primera edición de la Bienal. "Queremos que MUGAK se convierta en un festival de la arquitectura, el arte y la cultura", comenta Astigarraga. "Queremos que acerque la arquitectura a la ciudadanía y que así mismo haga reflexionar y dialogar a los profesionales de esta disciplina con otros campos como la sociología, la filosofía o la economía", agrega.
ArchDaily: ¿Cómo nace MUGAK?
Pedro Astigarraga (PA): Nace de una inquietud, la de promocionar y acercar la arquitectura a los ciudadanos, mediante el diálogo, el debate y la reflexión en torno a los espacios que habitamos como sociedad y como personas, y de una convicción, que esa reflexión llegue a ser constructiva y permita mejorar la vida de todos.
Para impulsar este foro de encuentro, hemos creado un programa de más de 115 actividades con exposiciones, conferencias, mesas redondas, talleres, proyecciones cinematográficas e intervenciones abiertas no sólo al mundo arquitectónico sino también a toda la ciudadanía.
La iniciativa partió hace meses desde el Departamento de Ordenación del Territorio, Medio Ambiente y Vivienda del Gobierno vasco, que organiza la Bienal, y colaboran en ella la Diputación foral de Gipuzkoa y el Ayuntamiento de San Sebastián. Se trata de una apuesta de país, que opta por una reflexión en común sobre la arquitectura, el espacio urbano y, en definitiva, sobre cómo deben de ser las ciudades en las que queremos convivir.
¿Cuál es el objetivo del comisariado en esta primera edición?
PA: Queremos que MUGAK se convierta en un festival de la arquitectura, el arte y la cultura, que acerque la arquitectura a la ciudadanía y que así mismo haga reflexionar y dialogar a los profesionales de esta disciplina con otros campos como la sociología, la filosofía o la economía.
Se trata de intentar recuperar el enfoque humanista de la arquitectura y, al mismo tiempo, afrontar los principales retos en los que se encuentra hoy, en esta etapa de post-crisis económica en Europa.
¿Qué busca posicionar esta Bienal?
PA: La palabra 'MUGAK' significa fronteras en euskera. De hecho, el nombre completo de la bienal es 'Mugak, Boundaries, Fronteras, Frontières'.
La Arquitectura ha crecido y se ha enriquecido históricamente habitando en los límites. Creemos que el nombre de 'MUGAK' nos permite posicionar a la Bienal en una posición de borde, en una encrucijada intelectual que le permita seguir ahondando en las orillas en las que germina la creatividad que pueda dar soluciones a los problemas contemporáneos.
De esta manera, la Bienal busca acercarse al ciudadano y reivindicar a los y las profesionales de la arquitectura, como personas que pueden contribuir a buscar soluciones para mejorar la calidad de las ciudades que habitamos y, por lo tanto, para mejorar la calidad de vida de las sociedades que las habitan.
¿Por qué es relevante para esta Bienal hablar del espacio urbano?
PA: El espacio urbano es el soporte físico de las ciudades, el territorio que las personas habitan y en el que conviven entre diferentes. Hoy, en muchas ciudades, sobre todo las grandes urbes, los espacios públicos se están convirtiendo en territorios de paso, perdiendo una de sus cualidades básicas, la de ser los espacios de relación entre los ciudadanos. Eso parece restarles importancia, pero una parte de la calidad de vida de las personas radica precisamente ahí, en la forma en que se configura una ciudad, en sus espacios públicos, en sus edificios, en sus conexiones y sus límites. Por eso es relevante centrarse en qué tipo de ciudades queremos, y para eso tenemos que reflexionar primero sobre la sociedad en la que queremos convertirnos.
Es un debate muy interesante que puede darnos muchas claves para el futuro, no solo de la arquitectura, sino de otros muchos ámbitos. Por todo ello, dentro de la semana inaugural de la Bienal además de contar con conferencias impartidas por profesionales de la arquitectura, tendremos también dos mesas redondas con personas del mundo de la literatura, la filosofía o el periodismo para dialogar sobre los modelos de ciudad que queremos y para reflexionar sobre las amenazas que se ciernen sobre ellas, desde la gentrificación hasta la masificación turística o la despersonalización.
¿En qué consistió la participación de RCR Arquitectes en la Bienal?
PA: En la Bienal se exhibe su exposición, 'RCR: Creatividad compartida', una extensa y magnífica muestra que recoge toda su trayectoria, siendo la exposición principal de MUGAK. Además, Rafael Aranda, uno de los tres miembros del estudio, dio la conferencia inaugural de la semana central de la bienal.
¿Por qué los escogieron?
PA: El proceso de creación que llevan a cabo: desde sus primeros bocetos, cómo trabajan entre las personas, la tecnología y la naturaleza hasta cómo dan ese sentido especial al paisaje. Desde Olot (Cataluña) viven entre el mundo rural y la tecnología, entre lo natural y lo artificial. Sus obras estimulan los sentidos y tienen el espacio, la luz y el paisaje como protagonistas de su lenguaje arquitectónico.
¿Y Sou Fujimoto?
PA: El caso de Sou Fujimoto es parecido. Nos parece uno de los arquitectos japoneses actuales más interesantes y sólidos. Su búsqueda absolutamente personal de los nuevos espacios para habitar, y la radicalidad en la manera de materializarlos y darles forma, diluyendo a menudo el umbral, el límite, del interior y el exterior, hacen que su discurso tenga un enorme interés.
Somos testigos de una explosión de Bienales en todo el mundo, ¿cuál crees que es el objetivo de estas instancias?
PA: Plantear preguntas y proponer espacios de diálogo y debate, mostrar el trabajo que están haciendo profesionales consagrados o emergentes y poner sobre la mesa perspectivas y caminos diferentes que puedan ser enriquecedores e inspiradores.
En nuestro caso, además, uno de los elementos que hacen de MUGAK una Bienal diferente es que la Escuela de Arquitectura de la Universidad del País Vasco va a trasladar físicamente a la sede principal del certamen a su alumnado. De esta manera, alrededor de 700 estudiantes de la UPV/EHU pero también estudiantes de las universidades de Reus, Burdeos, Montpellier, Valencia o Regensburg, van a desarrollar allí su labor lectiva, junto a sus profesores y otros asistentes a la Bienal, participando además en un montón de actividades.
Espero que lo que escuchen, vean o experimenten sea algo que les inspire y les influya como personas y como los arquitectos y arquitectas del futuro que son.