Como era de esperarse, la conferencia magistral de Peter Zumthor —que cerró el primer día de la jornada de conferencias del festival MEXTRÓPOLI 2017— llenó la casa y acaparó la atención de los asistentes.
El ganador del Premio Pritzker 2009 se enfocó durante su charla en el edificio que diseñó para el museo LACMA en Los Ángeles, California. Comenzó hablando sobre el concepto de “museos enciclopédicos”, planteando sus capacidades y limitantes, y afirmando desde su punto de vista que “en la realidad como yo la experimento, los museos enciclopédicos siempre son incompletos.” Esto llevó a la pregunta, ¿qué características debería tener un museo, pensando en sus visitantes?
Primero, según Zumthor, debería de permitir y posibilitar las experiencias personales. No debería crear un camino didáctico, debe evitar caer en la presentación de un tema desde la academia, para darle al visitante una sensación de descubrimiento de algo que no se le presenta ya analizado, ya concluido. Dice el arquitecto, “No quiero ser como un académico, quiero sentirme al comienzo del proceso.” El museo debe, también, activar una experiencia de la profundidad del tiempo, comunicarle a sus usuarios la certeza de que sólo estamos aquí por un momento; finalmente, permitir que los visitantes experimenten la belleza. “Yo estaría feliz si mis edificios habilitan todo esto... un museo debería sentirse como ser invitado a un bello palacio, y es tuyo.”, concluyó.
Al finalizar su presentación, Rozana Montiel y Julia Stüssi lo acompañaron en el escenario para hacerle algunas preguntas. Peter Zumthor, por su parte, venía ya preparado y en un momento proyectó una lista de diferentes temáticas que proponía discutir, incluyendo conceptos como “la memoria es la vida misma”, “mi cuerpo sabe más de lo que mi cerebro puede pensar”, y “arquitectura de mi niñez”. Con esto, finalizó el primer día de las jornadas de conferencias de MEXTRÓPOLI 2017.
Benjamin Romano abrió el segundo día de conferencias con una exploración profunda de su Torre Reforma, el actual rascacielos más alto de la Ciudad de México. El arquitecto resaltó las avanzadas instalaciones ahorradoras de energía de la torre, sus circulaciones, estructura, y proceso constructivo. Al final de su conferencia, Romano mostró un video en el cual se observa como una mansión de los años treinta fue retirada del sitio para después re-posicionarse una vez que los cimientos estaban en su lugar. Así, el edificio pudo ser construido directamente sobre la construcción que ocupaba el terreno originalmente.
Sin duda uno de los momentos más destacados fue la conferencia de Reinier de Graaf, socio de OMA, titulada “El Siglo que Jamás Sucedió”. A partir de conceptos como la economía de mercado y la caída del Muro de Berlín, afirma que “la historia de la arquitectura como la conocemos generalmente es el resultado de sólo una mitad de los sucesos.” Si bien hasta ahora su conferencia se inclinaba hacia lo abstracto, de Graaf la aterrizó hablando sobre el caso Pruitt-Igoe, un gran proyecto de unidades habitaciones en St. Louis, Estados Unidos de América. Según de Graaf, el fracaso de este proyecto —dado bajo condiciones histórico-sociales extremadamente específicas— terminó condenando y desacreditando a todo el movimiento modernista.
Después, Camilo Restrepo comenzó su conferencia planteando que no todos podremos vivir en las ciudades. Invitó a pensar en una alternancia entre los tejidos urbanos y rurales y entender la arquitectura como una manera de describir ese territorio. Entendiendo la ruralidad como un sistema productivo, una economía basada en la producción, Restrepo sugiere la arquitectura como un sistema que describe esa geografía y que concilia reciprocidades entre lo rural y lo urbano.
Planteó entonces la necesidad de volver a lo local, para que desde los pequeños núcleos geográficos surja una arquitectura identitaria, que pueda ser parte de los discursos globales. A partir de estas premisas presentó el proyecto Beneficiadero de Café que da capacitaciones a familias de caficultores y busca detener las migraciones de lo rural a lo urbano, llevando algo del confort que entrega la ciudad a los contextos rurales.
OB+RA, oficina compuesta por los arquitectos peruanos Oscar Borasino y Ruth Alvarado, presentó una selección de sus mejores obras a partir de fundamentos arquitectónicos vinculados con la cultura inca, la memoria y la topografía. Borasino y Alvarado mencionaron el territorio pleno de restos arqueológicos del que provienen como principal influencia en los arquitectos peruanos.
Por la tarde se presentarán las ponencias de Solano Benítez, William Curtis, y Diébédo Francis Kéré, cerrando así el festival MEXTRÓPOLI 2017.
