Santiago Ortega + Manuel Mendoza, finalistas del nuevo edificio de prácticas musicales de Universidad de Los Andes

Escrito por ArchDaily Team

Hace unos días les presentamos las propuestas premiadas en el concurso de diseño del nuevo edificio de prácticas musicales de la Universidad de Los Andes en Bogotá, Colombia. El futuro edificio de prácticas musicales de la institución bogotana se emplazará en el costado sur del denominado Campito de San José de la institución y contará con salas de ensayos, salas de práctica, estudios de grabación y servicios.

En esta ocasión les invitamos a conocer en detalle la propuesta de Santiago Ortega y Manuel Mendoza, finalistas del concurso, y quienes proponen un proyecto "articulador de las diferentes áreas del campus a través de la sucesión de múltiples lugares de encuentro a diferentes escalas es un sistema de senderos. Moviliza a sus usuarios a través de escaleras y rampas alrededor y a través del edificio, dotando al lugar de una gran flexibilidad en su ocupación".

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Memoria oficial: el proyecto se implanta adaptándose a la topografía, escalonándose para reducir sus alturas y no impactar las visuales de los edificios ubicados hacia el oriente respetando su valor histórico, y generando un escenario hacia el nuevo desarrollo del bloque C para poder comunicar los saberes generados en las aulas.

El escenario se convierte en punto de encuentro de todas las circulaciones de los diferentes puntos cardinales del campus. La idea de recorrer y acceder desde el exterior a los espacios del programa arquitectónico, permite reducir al máximo las áreas de circulación construidas y aumenta el área útil de los espacios interiores.

El programa fue cuidadosamente distribuido en el espacio de acuerdo a las necesidades de comunicación y control, iluminación, circulación, alturas y aislamiento acústico.

Los espacios del programa con mayor necesidad de aislamiento acústico fueron dispuestos en los pisos inferiores protegiendo su perímetro por el muro de contención del terreno.

La sala de cine requiere de mayor altura para poder cumplir con la certificación Dolby, el volumen se encuentra localizado sobre el nivel del terreno y empata con el puente peatonal existente en cubierta.

Se seleccionó la piedra cómo material principal de fachada debido a sus excelentes propiedades de aislamiento acústico, su cualidad paisajística para mimetizarse con la vegetación y el entorno, así cómo ser un material histórico y representativo del campus y la arquitectura tradicional bogotana.

La idea a futuro es que la vegetación predomine y los volúmenes queden ocultos en la visual hacia los cerros orientales, conformando así un jardín para la música.

La piedra permite el crecimiento continuo de vegetación sobre fachadas y muros. Un edificio vivo que con el tiempo se mimetizara en el campus y los cerros orientales. La cubierta verde sirve de aislante acústico y reduce en 10 decibles la contaminación sonora, un requerimiento indispensable para el programa del proyecto. Así mismo sirve de regulador térmico natural para refrescar los espacios en altas temperaturas y protegerlos del viento que baja de los cerros y penetrante sol de medio día.

El acceso a la gran sala de prácticas se convierte en un escenario polivalente donde pueden tener lugar diferentes eventos del campus.

Su ubicación en el edificio y el campus, y sus condiciones espaciales al poderse integrar con el escenario descubierto permiten a la gran sala de prácticas la posibilidad de desarrollar eventos interdisciplinarios y ampliar la experiencia de las diferentes artes que pueden coexistir en este lugar.