La XIII Bienal de Arquitectura de Costa Rica realizada entre el 4 y el 7 de mayo de 2016 en la ciudad de San José, fue declarada de Interés Cultural por el Presidente de la República y el Ministerio de Cultura y Juventud Costarricense. El evento contó con la participación de 12 conferencistas y una completa selección de proyectos y obras con diseño participativo, que buscaban dar a conocer propuestas integrales para el tema de la bienal: 'Arquitectura = Calidad de vida'.
Según la reflexión del arquitecto Edwin González, presidente del Colegio de Arquitectos de Costa Rica y Director de la Bienal 2016, "Como arquitectos, nuestra formación tiene un componente social importantísimo. Lo decimos en las aulas, lo decimos entre colegas, pero ¿qué estamos haciendo por aportar? Como Colegio de Arquitectos y profesionales, queremos aprovechar la instancia pública que nos entrega la Bienal para emitir un mensaje que incentive la búsqueda de la arquitectura como calidad de vida y también la práctica de la profesión".
Más detalles sobre lo que fue la XIII Bienal de Arquitectura de Costa Rica después del salto.
El evento se realizó en la ex cárcel pública de San José, recinto que recibió diversos intentos por mejorar sus condiciones de habitabilidad mientras se encontraba en funcionamiento, sin embargo, el penal fue definitivamente clausurado en 1979. De aquí en adelante, se plantearon variados proyectos para aprovechar el espacio, para finalmente concretar la idea de crear el Centro Costarricense de Ciencia y Cultura. En 1994 se inaugura el Museo de los Niños, locación de la reciente Bienal y excelente ejemplo de cómo mejorar la calidad de vida a través de nuevas propuestas de programa arquitectónico, entregando espacios de cultura para la comunidad.
La muestra de la Bienal da a conocer una amplia selección de obras de arquitectos profesionales y proyectos de estudiantes que incursionan activamente en la participación del usuario, con el objetivo de incorporar comunidades organizadas, niños, grupos étnicos, asociaciones políticas y otros al proceso de diseño y al desarrollo constructivo de las obras, humanizando la arquitectura en busca de soluciones integrales que realmente mejoren la experiencia del usuario.
Dentro de los proyectos destacados se encuentra la obra 'Cueva de Luz' de la oficina costarricense Entre Nos Atelier, que propone un programa de actividades culturales y recreativas complementarias al colegio a través del Sistema Integral de Formación Artística para la inclusión Social (SIFAIS).
También se expusieron obras que dieron respuesta a necesidades de comunidades religiosas, como es el caso de la 'Capilla Totihue' del arquitecto chileno Gonzalo Mardones, que recupera una antigua estructura agrícola afectada tras el terremoto de 2010 para implementarla como iglesia y centro de oración AIS. En términos urbanos, la propuesta del arquitecto costarricense John Osborne instaura 8 prácticas para una versión alternativa de desarrollo para la ciudad de San José en 2050, trabajando con corredores verdes conectados tanto a nivel regional como nacional con el objetivo de mantener la ecología natural y la calidad de vida de los habitantes. Dentro de las investigaciones más interesantes, destacamos "Imaginarios Sociales y Representaciones" trabajo liderado por el arquitecto colombiano Fabián Aguilera, que propone trabajar con estudiantes y comunidades para realizar acciones que generen sentido de pertenencia al lugar.
El principal objetivo planteado por el Colegio de Arquitectos es apelar a la conciencia social de ciudadanos y arquitectos, democratizando los conocimientos arquitectónicos para el uso cotidiano de cualquiera que desee saber más de arquitectura. De igual manera, se invita a los arquitectos asistentes a dejar el ego de lado y reflexionar sobre la propia práctica de la arquitectura y preguntarse: ¿Cómo puedo aportar yo a mejorar la calidad de vida?
Si quieres saber más detalles de las obras premiadas y lo que fue la XIII Bienal de Arquitectura de Costa Rica, puedes revisar el material disponible acá.
