- Área: 4180 m²
- Año: 2016
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Fotografías:Jeffrey Totaro
Descripción enviada por el equipo del proyecto. Situada en el edificio de Bedford existente de la City University de Nueva York, la renovación de la Biblioteca Universitaria Medgar Evers tranforma una tradicional biblioteca en un moderno bien de información, agregando un vidrioso centro de bienvenida, de 180 metros cuadrados, que da a la biblioteca una presencia ciudadana a la calle mientras que proporciona una nueva puerta de entrada a la universidad por la Avenida Bedford.
El concepto para la renovación se inspira en las páginas brillantes y reflectantes de manuscritos iluminados y su contraparte moderna, la pantalla del ordenador. Tratando cada superficie interior como una página brillante, la renovación transforma el antiguo espacio oscuro y sombrío en un ambiente de aprendizaje amplio y luminoso que aprovecha de ventanales orientados al norte y de una claraboya para iluminar el espacio, las superficies interiores, escalera escultural, salas grupales para el estudio y oficinas. Una nueva apertura de tres niveles a lo largo de la fachada norte y la nueva escalera escultural, física y visualmente enlaza los tres niveles. La apertura aumenta la legibilidad del espacio y por lo tanto la claridad del edificio, permitiendo al visitante ver las diversas funciones del programa de la biblioteca desde el acceso. El resultado es un bien común de información, inspirador, lleno de luz, y con espacios de estudio y para salas de clase.
Además de la transformación interior del espacio, la renovación transformó por completo el programa de la biblioteca. Construido en la década de 1980, justo antes de la llegada de la revolución de los ordenadores en las bibliotecas, la biblioteca Medgar Evers fue diseñada como un espacio tradicional de recogida y estudio basándose en el modelo aislado e individual de becas para el aprendizaje. Mientras que los espacios de estudio individual y las colecciones de libros todavía están disponibles, la renovación transforma las funciones de la biblioteca en un moderno espacio común para la información que apoya el aprendizaje colaborativo. Significativo para esta transformación es la recuperación de espacio de almacenamiento infrautilizado en el nivel inferior para las funciones menos comunes tales como, servicios técnicos, colección especial y la colección de libros tradicionales. Este enfoque libera espacio en el principal piso y la segunda planta para más áreas de estudio colaborativo y espacios impulsados por la tecnología en el aula.
La biblioteca ofrece renovadas estaciones de trabajo colaborativas adyacentes a personal de referencia y servicios de asistencia. Complementando los bienes comunes de información en la planta principal, hay diferentes salas de estudio grupales, un centro de medios y una pequeña zona de descanso. Anteriormente la biblioteca proporcionaba diez estaciones de trabajo. El nuevo espacio ahora cuenta con 42 estaciones de trabajo en la planta principal, 15 estaciones de trabajo en la planta baja y acceso a energía y datos en cada asiento. Además de los bienes comunes de información, 10 salas de trabajo en grupo, un centro de tecnología emergente, existen salas para pruebas y asesoría, y se proporcionan archivos y colecciones especiales. Estas adiciones fueron posibles dentro de la estructura existente mediante la reducción y la colocación de las colecciones más importantes en el almacenamiento móvil compacto, liberando así valiosa superficie para el uso del programa.
La rehabilitación incorpora una serie de características sostenibles con el fin de reducir el consumo de energía y mejorar la calidad ambiental interior. La pared vidriada al norte permite el ingreso de luz natural difusa a la biblioteca y un sistema foto-óptico monitorea los niveles de iluminación, manteniendo las luces artificiales apagadas la mayor parte del día. Todas las habitaciones cerradas tienen particiones de vidrio orientadas hacia los bienes comunes de información para pedir prestada la luz natural en todos los espacios del edificio. El techo reflectante reduce la ganancia de calor en las instalaciones, y un nuevo sistema de calefacción, ventilación de alto rendimiento y aire acondicionado mejoran enormemente el consumo de energía. Alfombra reciclada, suelos de madera de bambú, revestimientos de madera, pinturas de bajo VOC y la iluminación LED son utilizadas en todo para mejorar la calidad del ambiente interior.
