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Arquitectos: Husos Architects
- Área: 510 m²
- Año: 2012
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Fotografías:Taller Croquis, Javier García, Manuel Salinas
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Proveedores: Acesco, Holcim, Icomallas, Pallomaro, Pintuco
...y acciones para incentivar iniciativas no antropocéntricas de jardinería.
Este proyecto, en curso desde hace una década, ha consistido en el diseño y construcción de un edificio bioclimático en el centro de la ciudad de Cali y posteriormente en la gestión de diferentes actuaciones para incentivar iniciativas de cuidado medioambiental entre sus habitantes y visitantes. El edificio es un Jardín Hospedero y Nectarífero para Mariposas de Cali (EJHNMC), que alberga viviendas y espacios de trabajo.
Nació como encargo para diseñar un edificio para Taller Croquis, un pequeño taller de ropa y artículos de decoración en esa ciudad, pero cuyo territorio se estaba extendiendo en un archipiélago de pequeños puntos de distribución en el mundo. Además del microclima de confort que la fachada vegetal produce en su interior, lo cual disminuye el consumo energético, ésta permite que el edificio funcione como un prototipo de jardín doméstico amigable con los insectos y aves de la zona, que dependen de una red de corredores biológicos para moverse de un sitio a otro.
Esto se consigue a través de dos acciones:
La primera es utilizar vegetación vinculada al ecosistema local, principalmente de plantas nectaríferas y hospederas de mariposas, arbustivas y trepadoras, que a la vez forman parte del hábitat de aves y otras especies de insectos locales. Por el hecho de atraer mariposas, el edificio funciona a su vez como un biómetro que ayuda a medir la calidad ambiental y a visibilizar el valor único del ecosistema biodiverso en el que se encuentra. Las mariposas son en general uno de los bioindicadores más efectivos de la calidad y biodiversidad de un ecosistema, y son particularmente importantes en esta región que concentra la mayor diversidad de mariposas del planeta.
La segunda acción, que discurre en paralelo al diseño del edificio-jardín y que se ha desarrollado con la colaboración de biólogos y del zoológico de Cali, ha consistido en dinamizar y fomentar la divulgación sobre la importancia de la singularidad natural de Cali en el mundo y en definitiva, facilitar nuevos afectos entre los caleños que visitan la tienda y su entorno natural. Por ejemplo entregando semillas y folletos informativos entre los visitantes del edificio y organizando talleres con los niños del barrio.
Estas acciones han buscado contribuir a mantener los corredores biológicos dentro de la ciudad invitando a quienes reciben las semillas a plantarlas en sus balcones, antejardines y patios.
A través del diseño y la gestión del edificio-jardín, el proyecto ha funcionado como un conjunto de dispositivos afectivos multimedia que fomentan relaciones simbióticas entre la casa-taller y su entorno, reconociéndolos como entidades que funcionan en distintas escalas, desde la local hasta la global.
Los procesos sociales y naturales que en él se han llevado a cabo a lo largo del tiempo, lo ha convertido en un laboratorio de ensayo sobre el cómo aproximarse desde la arquitectura y su gestión a algunas de las dinámicas y temporalidades de “lo biológico” en la ciudad.