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Arquitectos: Bartek Arendt, Kasia Bedra
- Área: 276 m²
- Año: 2013
Descripción enviada por el equipo del proyecto. La casa se encuentra en la parte superior de la forma del valle por Radunia,
un pequeño río en el noroeste de Polonia. La parcela tiene vistas a un paisaje pintoresco, con numerosas colinas, campos y bosques.
A pesar de la hermosa ubicación, el sitio se destaca por algunas difíciles condiciones topográficas y de zonificación que requerían un enfoque de diseño poco convencional. Los planes de desarrollo local definen que cualquier nuevo edificio debe ser construido por lo menos cien metros desde la orilla del río, dejando sólo una pequeña parte de la esquina de la parcela para construir. Con el fin de mantener la integridad visual del paisaje construido, los reglamentos de zonificación requerían que todas las casas de nueva construcción debían inclinar sus cubiertas con un ángulo dado, haciéndo eco de la arquitectura rural tradicional polaca. También se estipula que todas las crestas de las cubiertas inclinadas deben estar orientadas en paralelo a una calle adyacente.
La parcela se encuentra al final de un callejón sin salida, comparte una frontera con la casa vecina hacia el Sur y es accesible en la esquina edificable nororiental. El resto de la parcela se inclina hacia el norte, hacia el río y el paisaje natural del valle. Tal topografía necesita un sistema que por un lado utilice el máximo de la luz natural, pero por el otro, se aproveche de las vistas y proporcione la máxima privacidad en el otro.
El brief del cliente solicitó un esquema simple para satisfacer todas las necesidades de una pareja residente, huéspedes ocasionales y espacio suficiente para exhibir una extensa y creciente colección de obras de arte y herencia. También debe ser lo suficientemente compacto como para reducir al mínimo la pérdida de calor durante los inviernos fuertes. El brief, la obligación de seguir las normas de zonificación y la intención de cumplir con el paisaje rural tradicional dio lugar a una pronta decisión que consistía en que el diseño debía parecerse lo más cerca posible a una casa granero arquetípica. Sin embargo, estas limitaciones iniciales fueron rápidamente revisadas ya que estas presunciones no provocaron ningún resultado satisfactorio. En lugar de ello, la solución más lógica para hacer era girar el granero de una manera tal que hiciera un máximo uso del sitio. Sin embargo girar el plan requería que el canto del tejado fuese orientado en diagonal, con el fin de alinearse con el eje de la calle.
Este movimiento ha cambiado la apariencia de la casa de un familiar en un granero abstracto. Las dimensiones de la forma rectangular en la que el diseño es inscrito y su rotación de 34.25° fueron logrados por numerosas iteraciones. Cada estudio fue conducido con el objetivo de optimizar el plan, conseguir la suficiente exposición de luz solar Sur-Este en las áreas de estar y en la terraza, proporcionar suficientes puntos de vistas y la privacidad desde los sitios vecinos del Norte, y alinear la cubierta a dos aguas paralelo a la calle. El esquema propuesto agrupa todos los servicios públicos y los espacios mecánicos en el lado de la entrada sur-este de la casa y abre los espacios comunales hacia el valle del río en el lado noroeste. El espacio se abre no sólo en en planta, sino también en la sección, integrando el paisaje con el interior y a pesar de la orientación norte, proporcionando suficiente luz solar.
La forma distintiva alcanzada por la rotación de la tradicional cubierta a dos aguas inclinada en diagonal al plan, dio lugar a una abstracta forma sólida e informado por la elección de materiales. Informados por los materiales de construcción de las casas tradicionales de la región, y con el fin de romper la masa y añadir otra lectura de escala mientras se aproxima al nivel del suelo, el ladrillo se utiliza como material de fachada principal. Con el fin de mantener la simplicidad de la masa del edificio, se seleccionó un ladrillo de hormigón gris. Del mismo modo, un simple revestimiento del techo que podría mantener la apariencia uniforme de la casa, la libre composición de las ventanas y una entrada de esquina tallada tomada como precedente de las viviendas tradicionales, están diseñados para que la casa se erige como un objeto abstracto, solitario en el paisaje.
