-
Arquitectos: Veintedoce Arquitectura
- Área: 220 m²
- Año: 2023
-
Fotografías:Fidel Gallaga
-
Proveedores: Estructuras y Perfiles, Maderas Unión, Telas Parisina
Descripción enviada por el equipo del proyecto. Dentro del marco de su proyecto curatorial El Efecto Sedimentario, la organización cultural INSITE nos invitó a colaborar en su tercer capítulo Una Forma Atemporal de Construir, basado en el libro del arquitecto vienés Christopher Alexander (1979) y el proyecto de vivienda social experimental conocido localmente como El Sitio (1976) en Mexicali, Baja California, mediante la comisión de un pabellón con la intención específica de proyectar el legado de Christopher Alexander. En el que solía ser el “Builder´s Yard” de El Sitio y recientemente un estacionamiento, se emplaza Situaciones de Estar; un pabellón que facilitó intercambios creativos y dinámicas sociales durante Una Forma Atemporal de Construir, evento curado por INSITE en el que arquitectos, filósofos y urbanistas de la región y más allá participaron en conversaciones, a la luz de las teorías de Alexander, sobre la producción de viviendas, la vida comunitaria, la filosofía arquitectónica y el urbanismo urgente en ciudades fronterizas.
El pabellón tenía necesidades tanto utilitarias como contextuales: un recorrido dinámico por El Sitio, proyecciones y conversaciones; que exigían confort térmico en el cálido clima del verano de Mexicali. Recurriendo al libro de Alexander "Un Lenguaje de Patrones" (1977) se observó que tanto las fuerzas programáticas como contextuales podían traducirse a patrones. Se eligieron los patrones, o “situaciones de estar”, que el pabellón facilitaría:
94 DORMIR AL RASO
106 ESPACIO EXTERIOR POSITIVO
119 SOPORTALES
171 LUGARES ÁRBOL
176 BANCO DE JARDÍN
243 BANCO CORRIDO
244 TOLDOS
Con estos patrones espaciales y de comportamiento en mente, se proyecta un pabellón que sirve a diversas situaciones de estar que podrían tener lugar en el patio de El Sitio: sentarse, recostarse, observar, sentir la brisa, asombrarse, compartir, escuchar, realmente escuchar, bailar, soñar despierto, dormir, comer...
Colocado en el centro del patio, con el edificio de viviendas de Alexander situado al oeste y frondosos árboles al este, encontramos un círculo que contiene desplazamientos concéntricos lo suficientemente anchos para acomodar los patrones espaciales y de comportamiento considerados. Los círculos se extienden para acomodar a 120 personas sentadas y posteriormente se dividen de forma longitudinal para posicionar una larga mesa comunal. La mesa cuenta con más asientos de los necesarios para los ponentes, lo que fomenta una interacción casual y menos jerárquica entre expositores y oyentes. Las “situaciones de estar” necesitaban diferentes alturas para su soporte. Las bandas se dividen en módulos; en consecuencia, se asigna una altura a cada módulo. Estos se eliminan donde sea necesario para facilitar la circulación hacia el jardín, entrada y edificio de viviendas. Una banda se extiende hacia el jardín sur, ofreciendo un lugar tranquilo para sentarse bajo los árboles (patrón 171).
Sobre la mesa se encuentra una estructura que sostiene tramos de textil amarillo; formando arcos reminiscentes a las bóvedas de madera utilizadas por Alexander en El Sitio. La tela se ajusta donde sea necesario para proporcionar sombra vertical en las horas de la tarde. La estructura central contrasta con el edificio adyacente al ser de un amarillo canario, color conocido por la flora del desierto. Los módulos son estructuras de madera de pino, con acentos amarillo canario. Durante estos tres días, el patio de constructores una vez más albergó una comunidad que compartió ideas sobre diseño comunitario y vivienda social, como eco a las conversaciones iniciadas en ese mismo patio por Christopher Alexander en 1972 con estudiantes y profesores.