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Arquitectos: Bieme Arquitectura, Equi Estudio
- Área: 4500 m²
- Año: 2022
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Fotografías:Biderbost Photo
Descripción enviada por el equipo del proyecto. El edificio FABRIKA es el resultado del primer premio en el concurso planteado por la Asociación de Empresas de Gipuzkoa ADEGI para la construcción de un edificio destinado a “Centro de Alto Rendimiento” de transformación de “La Cultura de las Empresas”. Se trata de un proyecto enfocado al apoyo y desarrollo de las empresas del territorio.
En un contexto empresarial significativamente cambiante, la “cultura de empresa” no debe ser entendida como un concepto rígido. En ese sentido, la arquitectura, si bien trata de resultar duradera y sostenible en el tiempo, no parecía casar excesivamente con la idea de “cambio constante” que se pretendía conseguir.
En ese dilema nace la idea de un programa libre, variado y multifuncional, donde conviven grandes espacios de trabajo polivalentes, flexibles e interconectados. De este modo, se plantea un edificio que, adaptándose a las estrictas limitaciones que la normativa planteaba, se configura sin alardes formales para facilitar su división y adaptabilidad a las situaciones más variadas que pudieran imaginarse.
Considerando el emplazamiento privilegiado del edificio en el Parque de Miramón de Donostia/ San Sebastián, el cual constituye un mirador excepcional y un remanso de paz en una de las ciudades más importantes del País Vasco, el programa se configura dejando los usos auxiliares hacia la calle de acceso y permite a los usos polivalentes disfrutar del entorno. Estos usos auxiliares y polivalentes quedan divididos por un elemento lineal que hace las veces de almacenaje de todos los tabiques móviles que permiten configurar de forma libre los espacios multifuncionales.
Adicionalmente, desde un inicio, la propuesta planteada se basa en la conjugación de dos “pieles” claramente diferenciadas, creando un volumen dinámico hacia el exterior y, a su vez, manteniendo su rotundidad funcional hacia el interior.
Sin embargo, la piel externa no es concebida como un elemento meramente estético, en este sentido, la fachada sur cuenta con amplias terrazas estratégicamente estudiadas para garantizar el sombreamiento de los ventanales en las horas de mayor radiación solar de verano y permitiendo, por otro lado, importantes ganancias térmicas en la estación fría, cuando el sol es más bajo y la radiación solar directa llega al interior del edificio sorteando los elementos horizontales.
Las fachadas este y oeste, por otro lado, cuentan con lamas verticales que permiten sombrear las grandes superficies acristaladas en verano y también facilitan que la radiación solar directa llegue al interior del edificio en invierno, evitando molestos deslumbramientos en las zonas de actividad.
La cubierta se tratará como una quinta fachada, ajardinando la misma, de forma que mejore el aislamiento y sirva a su vez como elemento caracterizador del edificio.
La materialidad del edificio, así como su formalización, se basa en el control del presupuesto, procurando maximizar el confort en el interior de los espacios y minimizando el coste en todo aquello que no fuera estrictamente necesario. El hormigón visto, la inmaterialidad del vidrio y los materiales fonoabsorbentes como la madera en formato OSB o el aislamiento proyectado en techos, forman parte omnipresente en todo el proyecto, los cuales otorgan coherencia y personalidad a la arquitectura que se presenta.