1999 Concurso Primer Premio
Arquitectos: Arq Gerardo Caballero, Arq. Mario Antonio Antelo, Arq. Maite Fernández, Gerardo Bordi, Ramón Herrera
Ing. José Ramón Orengo
2005 Proyecto Ejecutivo Arquitectos: Arq Gerardo Caballero, Arq. Mario Antonio Antelo, Arq. Maite Fernández, Arq. Orlando Alloatti, Arq. Mariana Suso, Arq. M. Eva Contesti, Arq. Gonzalo Carbajo Estructura: Ing. José Ramón Orengo Ubicación: Rosario, Argentina Fotografías: Gerardo Caballero, Jaime Cumpa
El proyecto se genera a partir de una serie de decisiones tendientes a vincular la nueva Escuela de Ingeniería con los edificios existentes en la Ciudad Universitaria de Rosario, para que ésta se sume al conjunto de una manera natural.
Las generosas dimensiones del terreno asignado propician la idea de un edificio en sólo dos niveles, facilitando su organización y logrando un ahorro en circulaciones que al unificarse permiten dimensiones mayores para convertirse así en ámbitos de encuentro dentro de la Escuela.
La presencia en el lugar de siete magníficos ejemplares de Palos Borrachos alentó la idea de organizar el edificio en torno a ellos creando un patio exterior cerrado que servirá de recreación tanto para profesores como alumnos.
Los departamentos de investigación adoptan una sección tipo “shed” para proveerlos de luz natural del sur y crear unos espacios de aspecto fabril donde poder “generar” conocimiento. La planta en L del edificio se completa con la presencia del IMAE con el cual conforma una plaza exterior.
La posición del auditorio sirve para delimitar dicho espacio al tiempo que por ser el Auditorio de la Ciudad Universitaria se ubica sobre el eje principal del campus, hacia la calle Riobamba el edificio reduce su altura para adaptarse a la escala de la calle.
El edificio esta concebido con una estructura de hormigón y terminaciones de hormigón visto en su exterior.
De la crítica del jurado
“… Implantación en el terreno y partido general:
El proyecto divide el terreno en dos franjas, una paralela a la espina NS del Cur, que se destina a espacios abiertos, dividido entre una Plaza Cívica haciendo cruz con la Plaza Canadá y un espacio más recoleto, expansión del bar en el extremo sur. El cuerpo del Auditorio oficia de articulador entre estos dos espacios.
En la banda oeste se desarrolla la totalidad de los locales de la Escuela y del Auditorio en planta baja, con excepción de las aulas de grado que se ubicaron en la planta alta.
En el ángulo interior de la “L” formada entre la Escuela y el Auditorio, se producen los accesos a los halles de ambos edificios, los que a su vez están comunicados entre sí. Con eso se pueden usar los multimedia y el bar directamente por la Escuela.
A su vez, el cuerpo de esta última se compone de de dos bandas, una que contiene todas las aulas de clase, las de posgrado en planta baja y las de grado en la alta.
Un segundo cuerpo de una planta baja profunda con luz cenital, contiene todos los departamentos e institutos, tratados como talleres, con buenas posibilidades de flexibilidad. Esta banda se interrumpe para crear un jardín que contiene a los 7 magníficos palos borrachos, el que a su vez alegra el espacio de doble altura que conecta y sirve de expansión a las aulas de clase. La ubicación de la Escuela permite su conexión con el edificio del IMAE.
Adecuación funcional: El desarrollo de casi todo el programa en planta baja, incluyendo el auditorio y las salas multimedia asegura un funcionamiento muy simple y eficaz, con una óptima relación entre posgrado, departamentos, instituto y gobierno.
Cumplimiento del programa: El proyecto cumple con todos los requisitos del programa, con locales de buena proporción, calidad ambiental y óptima orientación.
Criterios económicos: La tipología adoptada, los materiales propuestos y la mesura estructural aseguran que los estimables valores señalados se lograrán con ponderable economía de medios…”