Michel Gondry es un director de cine, guionista y productor francés, reconocido en gran parte por la dirección de videos musicales. A pesar de no declarar una relación directa con la arquitectura, sus videos naturalmente han tomado una dirección cercana al cine y al teatro, alcanzando una riqueza visual en la que la puesta en escena y las escenografías construidas son parte esencial del mensaje que se busca entregar, convirtiendo al músico en el protagonista de una historia de tres minutos.
En muchos de sus videos, el espacio arquitectónico y urbano es distorsionado y llevado al extremo, logrando crear imágenes emocionales, sugerentes y expresivas abiertas para provocar y evocar al espectador.
Gondry comenzó su carrera de realizador dirigiendo justamente los videos musicales de su propia banda, llamada Oui Oui, en la que él era el baterista. Con estos videos llamó la atención de grandes artistas como Björk, Radiohead, Daft Punk, The White Stripes, The Chemical Brothers, The Vines y Beck, entre muchos otros.
Su estilo logró marcar una diferencia con los demás directores del área al cruzar la línea entre los videos musicales y el cine, olvidando ciertas normas repetidas y obligando al músico a dejar de serlo por algunos minutos, para transformarse en el protagonista de un pequeño pero potente corto musical.
Potenciando la riqueza visual de sus videos, Michel Gondry ha desarrollado un enfoque más bien artesanal y esta quizás es su parte más arquitectónica. Como reflexiona Michael Sicinski en la Revista Cinema Scope: "Al igual que Frank Gehry o Peter Eisenman, Gondry es llamado, en esencia, por hacer su trabajo a modo de misión, no sólo por cumplir un encargo".
Videos musicales como cortos cinematográficos
El director ha recurrido en varias oportunidades a la construcción de escenografías a modo de maquetas teatrales, como en el caso de "Fire On Babylon" (1994) de Sinead O'Connor, donde una colorida y feliz casa se invierte para volverse triste y oscura, mientras en su interior una niña escapa del abuso de un hombre en una agobiante habitación con dimensiones claramente no habitables. Sus maquetas ganan mayor fuerza al mostrarse decididamente fantásticas: su función es totalmente provocativa y nunca real.
En "Protection" (1995) de Massive Attack, Gondry construye una gran maqueta de un edificio en el que se muestra la hacinada e individual vida moderna en vertical. En este caso el modelo se fabricó horizontalmente, acostado sobre el suelo, obligando a sus actores a permanecer en diferentes posiciones aparentando estar de pie.
El director vuelve a hacer referencia a la "locura" de la vida moderna y a las extrañas conductas del ser humano en "Knives Out" (2001) de Radiohead, video filmado en una sola toma dentro de una desesperante habitación verde de hospital, donde una cantidad excesiva de doctores y enfermeras realizan una cirugía. La televisión prendida muestra la violencia en la televisión y a través de la ventana, las luces de la ciudad -más cercanas de lo normal- aumentan la sensación de estrechez del espacio.
Otro tema tocado recurrentemente por Gondry es el de la ciudad como escenario cotidiano de situaciones extrañas e imposibles, como vemos en "The Hardest Button To Button" (2003) de The White Stripes, "Come Into My World" (2002) de Kylie Minogue o "Let Forever Be" (1999) de The Chemical Brothers, donde la la vida urbana es descontextualizada y transformada en una realidad onírica.
En el video de "Star Guitar" (2001), también de The Chemical Brothers, la intención es parecida, pero la relación se lleva a cabo a través de la composición entre los elementos urbanos y los bits musicales de un viaje en tren entre Nîmes y Valence, en Francia.
Quizás sin quererlo, Gondry tiene la capacidad de ver la arquitectura mas allá de lo estrictamente disciplinar para dar cuenta del espacio de una forma provocadora y emocional, rompiendo con la cotidaneidad de la ciudad y generando modelos y prototipos arquitectónicos, nunca habitables, pero siempre abiertos a evocar. En ese sentido, Michel Gondry declaraba hace unos años:
En mi opinión, es más interesante ver la magia suceder en un mundo conectado a la tierra. Si el mundo ya es una locura, entonces cualquier cosa puede suceder. Así que es mejor empezar con algo real
