Descripción enviada por el equipo del proyecto. Fusión de influencias arquitectónicas de diversas épocas, el diseño de esta casa pretende integrarse de manera muy estrecha con el paisaje rico en vegetación con una postura unitaria, sobria y eficiente. Esta casa de dos recámaras se diseñó para una pareja joven con un hijo. El terreno en el que se ubica es muy rico en selva baja caducifolia. Se ubicó la zona menos densa de esta vegetación para emplazar la casa. Este contexto natural muchas veces transformado en jardines convencionales se conserva e integra como un elemento primordial del diseño de la casa.
El diseño de esta casa es influenciado por varias corrientes arquitectónicas de distintas épocas que en primera instancia parecerían irreconciliables. La lógica de extender el espacio interior prolongando elementos horizontales de manera fluida hacia el exterior es una clara influencia de Mies Van der Rohe. El uso distintivo de la masa en los muros generando escenarios de sorpresa en conjunción con el uso del color es una influencia de la arquitectura de Luis Barragán… ahora bien los colores usados son de clara influencia regional: las haciendas henequeneras de finales del siglo XIX y principios del siglo XX; también de estas haciendas se retoma la altura del basamento y la relación que mediante este se consigue con el entorno, aunque trabajado a distinta escala. Finalmente la influencia del trópico, su clima y calidades del entorno nos llevó a trabajar una casa en que las únicas áreas cerradas son la cocina y las recámaras, de modo que las áreas sociales y de esparcimiento de la casa están al aire libre, si bien algunas de ellas con techos, pero completamente abierta al horizonte a modo de terrazas.
Importante en la concepción de proyecto fue la generación de distintos modos de relaciones con el entorno desde los distintos espacios de la casa… logrando que esta relación se identifique con cada tipo de espacio. Así pues se accede de manera discreta cruzando un jardín que encuadra de manera inicial una parte del paisaje con muros monumentales, generando un espacio de silencio y contemplación. Siguiendo el recorrido, un bloque de servicios limita inicialmente la vista de un espacio que al llegar, genera la sorpresa de entender que la sala y comedor de la casa están en el exterior solamente protegida por tres muros de distintas calidades y por una losa que se extiende para fusionar el espacio con el exterior.
Posteriormente se accede al área cerrada, que en realidad se percibe como abierta pues mediante el uso de paredes completas de cristal y siendo una circulación relativamente estrecha al parecer uno está circulando entre la naturaleza. En la primera sección se encuentra la cocina y un patio contenido únicamente lateralmente donde se encuentra un antecomedor exterior. Posteriormente se asciende hacia la zona de las recámaras, de modo que ambas quedan más altas que el resto de la casa, y lo anterior, aunado a que ambas están en la zona más densa de vegetación, genera una importante privacidad hacia estos espacios privados.
Formalmente la casa se configura con una sola losa rectangular que protege de la intemperie y una serie mínima de placas y bloques de servicios que contienen parcialmente y que configuran la secuencia espacial. Así pues, esta es una casa sencilla con fuerte vocación a relacionarse con el exterior y con espacios cargados del sentido de lugar y riqueza de ambientes.