Arquitectos: 2MGA, Romano Malfatti, Rita Malfatti, Dimas González Ubicación: Avenida Luis María Campos 398, Ciudad de Buenos Aires, Argentina Uso: Establecimiento de Educación Superior Superficie Cubierta Proyectada: 10.384 m2 Superficie Semicubierta-Exterior: 15.430 m2 Superficie del terreno: 178.822 m2 Equipo de Proyecto Licitatorio: Arq. Romano Malfatti, Arq. Rita Malfatti, Arq. Dimas González Velardo, Arq. Andrés Glezer, Sr. Fernando Valeriani Colaboradores: Srta. Romina Giorno, Sr. Salvador Cabezón Contratista: TEXIMCO SA Dirección de Obra: Ing. Pablo Viggiano – Inspección de Obra: Ing. José Rigoni Fotografías: Agustin Barrionuevo
La propuesta de unificación de las Escuelas de Guerra plantea un desafío que asumimos como la oportunidad para un cambio de hábitos hacia nuevos paradigmas institucionales.
El predio existente posee características destacadas como Área de Protección Histórica dentro del denominado “Corredor Histórico Av. Luis M. Campos”, por lo que entendemos una oportunidad fuertemente vinculada a la capacidad de dar respuesta a los requerimientos programáticos, funcionales, y patrimoniales puestos en juego. Así entonces, creemos, este cambio de arraigadas culturas podrá encontrar -en su transición inicial- un entorno que promueva el cambio a lo nuevo, resalte la convivencia y se enfoque como el ámbito académico que representa.
Como respuestas iniciales entendemos absolutamente necesaria la Optimización del Uso del Suelo, permitiendo un mayor espacio abierto en el predio.
Esto implica el reordenamiento de los accesos y las circulaciones, ya que aprovechando los desniveles de la barranca es posible generar una nueva entrada a nivel por la Avenida Dorrego en el cual se inicia un cauce interior que va diagramando los diversos accesos en una secuencia dinámica que intensifica las relaciones entre espacios.
La anterior propuesta se complementa con la solución de disponer de los edificios existentes como reserva de espacio a expandir mediante intervenciones a los mismos, Revalorizando su Presencia Patrimonial desde su nuevo destino. Esta solución reduce los costos ya que se optimizan las áreas construidas mientras se aprovechan las intervenciones para dotar o actualizar los sistemas de instalaciones, apoyo técnico, infraestructura de servicios, etc.
Desde este punto nos proponemos una intervención sintética que se caracterice por una intención de complementación a los edificios existentes respetando su imagen desde un enfoque no mimético, exhibiéndose con honestidad en iguales términos a la intervención funcional: planteamos también una actualización morfológica, exponiendo su funcionalidad como una virtud.
El objetivo final buscará componer una imagen abierta, que mediante la presencia del vacío (en sus distintas escalas) vincula tanto los elementos nuevos entre si como estos con los restaurados originales, resolviendo la unidad entre partes.
Una unidad que, como interpretación del proyecto institucional, es una composición entre situaciones preexistentes; por lo tanto el intento plantea develar una identidad compuesta por heterogeneidades, con la vocación de ser inclusiva con lo previo, pero a la vez renovadora.
La propuesta procura manifestarse con respeto a los edificios existentes, y de tal forma parece estar asentándose, midiendo las distancias de su nuevo emplazamiento; esta intencionada cualidad se completa con los espacios vacíos como materia aglutinante, y es mediante a las pausas entre piezas que los elementos se permiten compartir intersticios comunes de diferentes escalas y proporciones, en los cuales lo previo y lo emergente conviven con una espacialidad que se insinúa compleja: desafiante y provocativa, pero a la vez respetuosa con el patrimonio.
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