Entre 1973 y 1977, Álvaro Siza diseñó tres proyectos de conjuntos de viviendas que en conjunto forman un periodo definitivo en el temprano trabajo del arquitecto. Dos de ellos, Bouca y Víctor São, fueron proyectos de bajo costo diseñados para el comité de trabajadores, pues las condiciones de sus viviendas eran muy precarias y se encontraban en malas condiciones, luego de la revolución de 1974.
Malagueira, el tercer proyecto, fue diseñado como una comunidad suburbana a las afueras de Évora, una antigua ciudad romana, situada a unos 100 millas al este de Lisboa. Malagueira abarca una gran cantidad de terreno ( 27 hectáreas) con construcciones de poca altura (dos pisos), con una alta densidad de viviendas (1200) construidas en un período de unos 20 años, a diferencia de los otros dos conjuntos (de entre 40 y 12 unidades respectivamente).
Se eligió a Siza para la comisión de Malagueira, por su experiencia con Bouça y São Victor. El programa de Évora era diferente al del Trabajo de Oporto y la idea era construir una comunidad completamente nueva que eventualmente sería propiedad de los residentes en una organización cooperativa. El arquitecto se opuso al título de “vivienda social”, señalando que Malagueira no fue pensada como una instalación típica de viviendas sociales subvencionadas.
En el lugar, existían dos barrios Santa María y Nuestra Señora de la Gloria, que habían crecido a lo largo de una de las carreteras radiales que salen de la ciudad, creando un eje este-oeste. También pasa un arroyo en los límites de estos barrios, que juntos constituyen los límites de la nueva construcción.
La organización de la grilla de Santa María fue el modelo para el dibujo del nuevo barrio, formando un partón de nuevas calles de pequeños fragmentos en una grilla paralela. En el borde norte de Santa María se forma una zona larga y estrecha para abrir espacios públicos a lo largo del arroyo. Otros grupos de viviendas fueron ubicados en diferentes ángulos, formando varios barrios separados que responden a las alineaciones propuestas en el paisaje. Los espacios intersticiales entre barrios son parte de los espacios públicos abiertos . Estas áreas que se encuentran entre las agrupaciones urbanas de casas, se utilizan para usos comunitarios, tiendas, estacionamiento, recreación, y la circulación peatonal.
Un sistema de acueductos de hormigón levantado conecta los grupos residenciales separados entre sí y proporcionan la infraestructura para el agua y la distribución eléctrica. Los acueductos eran una característica de la época romana y luego de la época renacentista y restos de estos son todavía visibles en Évora. Se utilizaron canales hechos de bloques de hormigón que se apoyan en columnas que forman una estructura más o menos continua a modo de galería que conecta los barrios, suministrando el servicio a cada casa. El acueducto fue justificado por el bajo costo, y que a la vez funciona como un elemento para la planificación a gran escala que conecta los barrios y forma áreas públicas definiendo las entradas a los grupos de tiendas y otras instalaciones públicas. Debido a se construcción en altura, desde el segundo nivel, se dejó como hormigón a la vista que proporciona un alivio visual frente a la repetitiva y continua pared blanca de las viviendas.
Las residencias de Malagueira son de tipo Patio o Atrio, con una planta en forma de “L” con dos grupos de recintos que dan a un pequeño patio interior. Hay dos tipos similares de viviendas, ambos construidos en un solar de 8×11 metros, uno con el patio al frente y el otro con el patio en la parte trasera. Ambos tienen un estar, comedor y la cocina en el primer nivel, y una escalera interior que lleva a los dormitorios y terrazas del segundo nivel. Los dos tipos se pueden combinar de varias maneras diferentes, resultando diferentes juegos de llenos y vacíos. Esta manipulación de las combinaciones de pares es una clave para lograr un ritmo agradable a la vista, logrado sólo con dos tipos de viviendas.
La dimensión vertical de los muros varía desde la altura de la puerta de entrada, a la altura del segundo piso, a una pared de ventilación que es perpendicular a la calle y se extiende a la altura del techo del segundo piso. Este rango de alturas de muros, junto con la posición alterna de los patios y terrazas resulta en una rica composición tridimensional. La construcción sigue la topografía existente, lo que trae a cada casa una propia identificación.
Desde lejos, las casas parecieran ser más altas que de sólo dos niveles, al intensificar los contornos entregando la impresión de una organización más densa, más alta y más aterrazada. El conjunto limitado de las formas de puertas y ventanas, varían también en altura con el fin de organizar y concatenar las paredes. Las casas están diseñadas para ir agregándole habitaciones, cada vez que la familia lo requiera, de modo que puede comenzar como una casa de dos habitaciones simples y que luego se puede transformar en una vivienda mucho más grande con varios dormitorios, baños múltiples, y azoteas.
La calidad incompleta del revestimiento de las casas en conjunto con el volumen de paredes, ayuda a quebrar la repetición estricta y típica de un conjunto de viviendas de bajo costo.
Extracto, traducido de página oficial Álvaro Siza Vieira
Arquitecto: Álvaro Siza Ubicación: Évora, Portugal Número de Viviendas: 1200 Año Proyecto: 1973 Vía: Álvaro Siza Vieira Fotografías: Revista El Croquis, Usuarios de Flick: ekainj, il deserto rosso, gva_jb
