Descripción enviada por el equipo del proyecto. La estructura y emplazamiento del conjunto de las masias, son el resultado de un proceso de siglos para estudiar la manera de superar una serie de condicionantes como el relieve, las diferencias climáticas y la búsqueda de la máxima simplicidad constructiva y estructural para conseguir una eficacia funcional.
Las masias son en origen lugares de producción con unos requerimientos funcionales que provocan habitualmente que la arquitectura derive en la convivencia de un conjunto de formas unidas entre sí con distintos estilos formales como consecuencia de la construcción en diferentes etapas.
La intervención tiene como punto de partida el análisis de los diferentes elementos a conservar, sus conexiones y la reordenación de los accesos para adecuarlo a un uso residencial.
Situado en el límite de un valle, dominando el paisaje próximo y lejano, el conjunto se encuentra encastrado en un bancal del terreno en su lado norte y se compone de una edificación principal, un anexo adosado a ella y una cabaña exenta.
La intervención consiste en el desplazamiento del volumen anexo que consta de planta baja y un piso para crear un vacío entre éste y la casa principal. Este vacío en planta semisótano, actúa como acceso y distribuidor entre las partes que conforman el conjunto de la masia. Se comunica con el exterior por sus dos extremos, uno a cota planta baja y otro a través de un suave talud que permite la entrada de luz de mañana a tarde con la posibilidad de atravesarlo como si de un camino se tratara.
La nueva cabaña de dimensiones parecidas al anexo original, la cabaña existente y la casa principal aparecen como elementos aislados en la primera planta a nivel del terreno del bancal superior, adoptando la dispersión volumétrica tradicional de los conjuntos de las masias.
La nueva cabaña se concibe como un volumen arquetípico de chapa de hierro, como los cobertizos o cabañas que los payeses construyen para almacenar leña o utensilios del campo, que revisten con las chapas de los bidones de gasóleo previamente rectificadas para convertirse en una plancha lisa.
El despiece de las chapas de diferentes anchuras recuerda los cerramientos de madera adoptados en la construcción principal y la cabaña existente como referencia a los que se hallan en los conjuntos tradicionales.
La nueva cabaña contiene un dormitorio, un baño y la escalera que lo conecta con el distribuidor en la planta baja.
Tres aberturas, a piel de fachada, relacionan el volumen con el exterior, una hacia el cielo, una hacia las montañas y una hacia el valle que la precede.