La técnica del tejido en Mimbre se asocia a la tradicional manufactura de objetos utilitarios de pequeño formato. Esta técnica instalada en Chile desde la Colonia, destaca por el potencial que entrega para construir formas complejas y resistentes a partir de la flexibilidad de la fibra y la rigidez que proporciona el tejido. A partir de estas propiedades, este proyecto explora en la manufactura del tejido, ahora en relación al ámbito de la arquitectura. Se trata de una investigación que indaga en los potenciales de una materia prima natural y una técnica ancestral de carácter patrimonial, en relación a nuevas opciones de uso.
Las superficies tejidas en mimbre cambian su comportamiento de manera opuesta desde el ámbito del diseño hacia el de la arquitectura. Así, mientras en la escala de los objetos, el resultado del tejido es rígido y por tanto es resistente a esfuerzos de compresión (empuje), en la escala de la arquitectura, estas superficies tienden hacia la flexibilidad, lo cual la hace principalmente resistente a esfuerzos de tracción (estiramiento). La oposición del comportamiento material entre ambas escalas genera cambios en el proceso de diseño y construcción de los tejidos, sin embrago los criterios de diseño permanecen inmutables.
El espesor de la fibra de mimbre, la geometría que ordena el tejido, la forma que lo estructura y la técnica artesanal que los construye, son las variables que determinan las propiedades de este tejido y sus alcances. Estas variables entregan las herramientas de diseño para el óptimo desempeño del material según su uso y escala.
La capacidad de construir espacios que alcanza el tejido en la escala de la arquitectura, es de la misma forma que su comportamiento en los objetos, una propuesta de máxima eficiencia y perfecto equilibrio entre la forma, la resistencia y la cualidad espacial.